Si has participado en la creación y desarrollo de un negocio seguramente te preguntes por qué has de gestionarla como las demás si, para ti, es único. Llevar las riendas de un negocio implica muchas tareas y responsabilidades, entre ellas, elegir un software de gestión de empresas para funcionar en el mercado digital de hoy en día. ¿Es posible tener una herramienta de este tipo hecha a medida? La respuesta es que sí y, además, va a reportarte muchas ventajas.
Beneficios de un software a medida
- Te garantizarán la utilidad de las aplicaciones incluidas en la plataforma. Aunque esto puede parecer obvio, no lo es en el caso de los software estándar, donde algunas funcionalidades pueden no ser de provecho para tu negocio.
- Adaptabilidad con el cliente. Este es un punto importante, sobre todo, desde que las empresas han empezado a poner al cliente en el centro de negocio como estrategia para crecer. Aunque pueden tener características comunes, cada persona es única y la tecnología debe ser lo suficientemente ágil y flexible para dar respuestas a todos. Un software a medida se puede configurar con estas funcionalidades, de manera que ofrezca personalización y logre la mayor fidelidad posible.
- Integración interna. Un software a medida se integra mucho mejor que otro estándar en las áreas internas de gestión digitalizadas que ya tengas en tu negocio. Además, es capaz de solucionar los problemas más rápidamente y aumentar la comunicación. Con respecto a las tareas digitales, este tipo de herramienta elimina la burocracia que impacta negativamente en la forma y el flujo de trabajo, permitiendo mayor capacidad de respuesta.
- Mayor seguridad. Puedes elegir el nivel y número de barreras de protección, seleccionando los procesos y protocolos de seguridad sobre la información interna, así como su manejo. Al mismo tiempo, se pueden instalar las actualizaciones de obligaciones legales más fácilmente, minimizando la burocracia y aumentando la rentabilidad.
Como hemos indicado antes, la personalización de las aplicaciones a tus necesidades y a las de los clientes es una de las principales ventajas del software a medida. Pero también es interesante detenernos en la capacidad de adaptabilidad a los procesos de trabajo y también de la plantilla de este tipo de soluciones. De nada nos sirve tener una herramienta de gestión si los empleados no logran entenderla.
Por eso, a la hora de confeccionar un software a medida podemos adaptarlo al tamaño de la empresa, ampliando o reduciendo el margen de uso y los sectores de alcance. También existe la posibilidad de que la adaptación sea por sector o por necesidad.
En definitiva, a diferencia de lo que ocurre con los software de gestión estándar, uno personalizado se confecciona arreglo a las necesidades y situación de tu empresa. Por tanto, crece con ella y atiende mejor a las demandas de su sector o su tamaño.