Con el paso del tiempo, y dependiendo del uso que hagamos del equipo, puede que notemos que Windows 11 no termina de ir del todo fino, y que empiece a darnos algunos problemas, ya sean de rendimiento o de estabilidad. Cuando ocurre esto, siempre es recomendable realizar un mantenimiento básico para intentar recuperar el rendimiento del equipo, pero si esto no tiene el efecto deseado no nos quedará más opción que restablecer el equipo.
Cuando restablecemos el equipo podemos elegir que se eliminen todos los datos, archivos y configuraciones, así que es imprescindible que realicemos antes una copia de seguridad, ya que de lo contrario podríamos perderlo todo. Tenedlo muy en cuenta antes de proceder.
Para restablecer un PC o un portátil basado en Windows 11 solo tenéis que seguir estos pasos:
- Lo primero es pulsar el botón de Windows y escribir «Restablecer este PC».
- Entramos en el primer resultado, y elegimos la opción correspondiente para iniciar el proceso.
- Se nos abrirá una ventana emergente que nos permitirá elegir qué queremos hacer, si mantener los archivos o eliminarlos.
- También podremos elegir entre hacer una reinstalación en local o en la nube. Normalmente la primera opción es más rápida.
- Hacemos clic en restablecer y listo, el proceso dará comienzo, aunque si por cualquier motivo cambias de idea todavía tendrás un cierto margen para cancelarlo.
Una vez que el proceso de restablecimiento empiece, tendrás que esperar un tiempo hasta que se complete. Ese tiempo puede variar en función de las especificaciones del equipo sobre el que ejecutabas Windows 11, y puede ir desde unos pocos minutos, en el caso de equipos muy potentes, hasta más de una hora en el caso de equipos más modestos.
Cuando finalice, el equipo nos llevará a la pantalla de configuración de Windows 11, donde tendremos que volver a realizar esa configuración de inicio que casi todos conocemos. No tiene misterio, solo tendremos que seguir el proceso autoguiado para escoger el idioma, conectarnos a una red y demás opciones.
