La inminente subida de los precios de la luz, que afecta a todos los sectores, pero particularmente al pequeño comercio y la hostelería y, en los próximos meses, del gasoil, donde se verán los efectos de la desaparición del impuesto especial de hidrocarburos y las subidas del denominado céntimo sanitario hasta sus límites máximos por parte de varias CCAA, «complicarán más la vida y el trabajo de miles de autónomos y encarecerán sus costes o bien disminuirán sus rentas», asegura la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA).
«Estas dos medidas afectan negativamente a la inflación en general, con la diferencia de que en las grandes empresas las subidas se aplican a los consumidores, mientras que entre los autónomos no se podrán aplicar al precio, por lo que vendrán en detrimento de sus rentas familiares o personales ya muy mermadas en estos años», denuncian desde la organización.
En caso de confirmarse estas subidas, UPTA ha anunciado que pedirá que con urgencia que se abra una Mesa en el Ministerio de Hacienda con el fin de «revisar a la baja los módulos para la declaración objetiva del IRPF que afectan a casi 800.000 autónomos que tendrán objetivamente menos rendimientos en este año y sin embargo siguen pagando sus impuestos de acuerdo a unos criterios de beneficio que han quedado obsoletos».