El Gobierno está ultimando un nuevo paquete de medidas de ajuste con el objetivo de asegurar el cumplimiento de las metas de déficit público de 2012. El tamaño del ajuste, aún por definir, podría ascender a una cifra de hasta 30.000 millones de euros -un 3% del PIB- .
«La idea es recortar el coste de los funcionarios para las arcas públicas, congelar las pensiones, meter también una bajada al coste de las prestaciones por desempleo, cerrar las televisiones públicas», aseguran dos fuentes conocedoras del asunto. «No hay ninguna decisión tomada. Lo único que hay son cálculos técnicos, cuánto se podría ahorrar con esto, cuánto se podría ingresar con lo otro. Pero puede ser parte, todo o nada», dijo otra fuente cercana a otros altos cargos del Ejecutivo.
Por su parte, esta semana, el ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, recalcó el rotundo compromiso del Gobierno con el objetivo de déficit público para lo que, ha dicho, se harán «esfuerzos adicionales» en «distintos componentes de la administración» que se conocerán «en las próximas semanas».
