Tal y como consta en la Memoria de la Fiscalía General del Estado del año pasado, el recrudecimiento de la crisis económica provocó en 2011 un incremento de los delitos económicos, sobre todo por fraude en el IVA. El informe anual indica que «existe una tendencia al alza en el número de delitos contra la Hacienda Pública» y que las investigaciones por defraudación de IVA aumentaron «de forma significativa».
La Memoria de la Fiscalía General advierte de que «la crisis económica lejos de remitir, se ha ensañado con la sociedad» e indica que sus consecuencias se manifiestan «con especial virulencia en el ámbito del Derecho Penal». En este sentido, alude a que el cierre de empresas, la pérdida de puestos de trabajo y las crecientes dificultades, son el «caldo de cultivo idóneo para la comisión de un nutrido número de delitos económicos».
Aunque, la memoria anual no especifica el número exacto de presuntos delitos económicos cometidos en 2011, sí señala que se ha producido un incremento de los mismos.
El informe invita a los fiscales a tener un espíritu crítico y no criminalizar conductas delictivas que no lo merezcan y obedezcan a razones económicas coyunturales y sin embargo ser más rigurosos con las conductas defraudatorias que causan directa o indirectamente pérdida de puestos de trabajo.