En las últimas semanas se suceden las encuestas y los estudios que intentan reflejar el impacto que tendría para las empresas catalanas una posible independencia de Cataluña.
La penúltima en sumarse a esta tendencia ha sido la Cámara de Comercio de Barcelona, que en un estudio encargado al Instituto Dym, dictamina que el 61,8 por ciento de las empresas catalanas cree que una Cataluña con Estado propio integrada dentro de la Unión Europea no tendría consecuencias económicas significativas para su empresa.
El estudio, que se basa en una encuesta telefónica que toma como muestra 802 empresas catalanas de todos los tamaños y sectores de actividad, indica además que otro 24,3% de los consultados opina que las consecuencias serían inciertas y un 13,8% negativas.
El director de estudios económicos de la Cámara, Joan Ramón Rovira, ha aclarado que la encuesta no se traduce en un pronunciamiento de esta entidad, y ha añadido que las preguntas realizadas se limitan a valorar el impacto económico que tendría una Cataluña con Estado propio sobre una empresa, si bien no se ha preguntado la opinión política de los empresarios sobre una posible independencia.
Por dimensión de empresa, la valoración positiva es superior al total entre las microempresas, con un 37,1 por ciento, e inferior en las de mayor tamaño, con un 15,4, mientras que las pequeñas empresas obtienen un porcentaje inferior al total en la respuesta negativa, con un 8 por ciento.