Nuestro teléfono inteligente se ha convertido en una herramienta imprescindible a la hora de «ir de compras». Según Connected Commerce, un estudio desarrollado por DigitasLBi, el comercio electrónico móvil (m-commerce), las redes sociales, el showrooming (práctica en la que los consumidores acuden a la tienda para examinar y probar en persona un producto antes de adquirirlo online o en otro lugar, a menudo a un precio más bajo) y el ROPO (Research Online Purchase Offline) tienen como protagonista a un smartphone que cada vez más protagoniza el comercio on-line y off-line.
Según el estudio, que se ha llevado a cabo en 12 países, el Showrooming es una tendencia cada vez más dominante y en el caso español, tres de cada cuatro usuarios consideran que una diferencia de precio del 5% sería motivo suficiente para abandonar la tienda sin comprar.
A nivel global, la mitad de los encuestados coincide en que la utilización de los smartphones ha cambiado la forma en que compra. De hecho un 34% aseegura que ya ha comprado al menos una vez desde esta plataforma (26% en el caso español) y un 72% indica que lo ha utilizado dentro de un establecimiento físico para comparar precios.
Otro fenómeno que crece es el ROPO, que permite a los usuarios mejorar su experiencia de compra: el estudio afirma que el 88% de los consumidores encuestados busca en Internet y compra en la tienda física. A pesar de ello, el punto de venta se mantiene como principal referencia de contacto y es la tercera fuente de información preferida para el consumidor.
En cuanto al uso de redes sociales, la mayoría de los usuarios afirma que de una u otra forma influencia sus decisiones de compra. Hasta un 82% de los usuarios chinos aseguran que el social media influye en su comportamiento, mientras que en países como España, Italia o Estados Unidos el porcentaje baja hasta el 55%. Además en nuestro país un 35% de los usuarios afirma seguir marcas en las redes sociales.
En su conjunto y tal y como explica Vicent Druguet, director general adjunto de Connected Commerce, «los compradores de todo el mundo utilizan de forma habitual los dispositivos digitales antes de comprar en el punto de venta. Se necesita motivar al usuario para que entre en la tienda física, un entorno en el que el móvil y el social media están cambiando las reglas del juego. Los comerciantes necesitan adaptarse para ofrecer a sus clientes experiencias tan interesantes, útiles y personales como las que tienen en el entorno online, combinando todo los puntos de contacto para conseguir una experiencia de compra enriquecedora”,