¿Tienen sentido los wearables en el espacio de trabajo? Más allá de su valor como herramientas de fitness o dispositivos adicionales en los que recibir las notificaciones de nuestro smartphone, ¿Pueden aportar un valor propio y diferencial?
Salesforce lo tiene claro. Aunque todavía estamos en una fase temprana en cuanto al posicionamiento de productos como smartwatches, pulseras inteligentes y gafas electrónicas y que de momento, únicamente estamos descubriendo algunas de sus posibilidades, estos dispositivos tienen ya algunos de los ingredientes necesarios para triunfar en el entorno laboral.
La propia Salesforce de hecho, acaba de lanzar versiones de alguna de sus aplicaciones para dispositivos wearables. Concretamente la empresa ya ofrece sus herramientas para el reloj Pebble, Samsung Gear smartwatch, Google Glass, la plataforma Android Wear, el brazalete inteligente Myo y la pulsera biométrica Nymi y anima a cualquier empresa interesada a utilizar su plataforma para desarrollar apps de negocio que puedan encajar en estos nuevos dispositivos.
Según los responsables de Salesforce, los werables pronto van a dejar de estar orientados exclusivamente al usuario final, para tener cada vez más sentido en el ámbito corporativo y se hace eco de un reciente estudio de Abi Research que afirma que para 2019, el mercado profesional de wearables supondrá ya nada menos que 18.000 millones de dólares.
Dicho lo cual, ya hay grandes empresas que están empezando a trabajar con al menos uno de estos dispositivos. Philips por ejemplo, utiliza dispositivos que monitorizar el estado físico de sus empleados, Virgin está llevando a cabo varios experimentos con Google Glass e incluso en España, una compañía como Prosegur ha desarrollado programas piloto con las gafas inteligentes de Google.
Por supuesto ahora toda la industria está poniendo su mirada en Apple, esperando si la empresa de Cupertino va a lanzar próximamente el rumoreado iWatch y en ese caso, con qué aplicaciones va a poder contar en el puesto de trabajo.
