En las últimas semanas los europeos hemos aprendido una nueva palabra, vestida de dramático neologismo: «Grexit», la posibilidad de que Grecia acabe abandonando el euro. Un término que no sólo ha puesto en el punto de mira a todos los griegos, sino también a una startup fundada en 2011 y que lleva el mismo nombre.
Como cuentan en Quartz.com, las últimas semanas han sido de locos para los trabajadores de Grexit.com, una pequeña startup que desde hace unos años ofrece una herramienta que permite a los usuarios de Gmail colaborar de una forma más eficiente, automatizando tareas entre los distintos departamentos de una empresa y mejorando la comunicación interna.
Y ha sido una locura, porque las visitas que ha recibido Grexit.com en las últimas semanas se han disparado en más de un 20%. Lo cual y en contra se lo que se podía pensar, no ha beneficiado en nada a los intereses de la empresa. Nitesh Nandy, fundador de la startup, cuenta a la publicación americana que «aunque han aumentado las visitas, se ha disparado el tráfico de baja calidad y ha distorsionado nuestras analíticas, de modo que nos resulta muy complicado ahora entender cuál es nuestra tasa de conversión y esto afecta a las ventas».
Lo curioso es que Grexit no fue el primer nombre en el que pensaron los fundadores de la empresa. Comenzaron en 2010 considerando el nombre «Open Inbox», pero ya estaba registrado. Así que se decidieron por Grexit, sumando la palabra latina «Grex» que puede traducirse como «manada» a la inglesa «it». Tras registrar el nombre comenzaron a trabajar con normalidad en una incubadora de empresas en La India, y fue tan bien que en 2012 abrieron su primera oficina en Palo Alto (California). Ahora y tras los acontecimientos de las últimas semanas, los fundadores reconocen que tal vez lo mejor sea cambiar el nombre de la empresa, toda vez que no quieren seguir siendo asociados con una situación tan negativa.
El caso de Grexit, aunque curioso, no es el único. El año pasado sin ir más lejos, la startup de pagos móviles Isis, tuvo que cambiar su nombre a Softcard, después de que el Estados Islámico decidiese «bautizarse» con este nombre.
