Controlar la actividad de los trabajadores a través de werables y otros dispositivos inteligentes. Esta es la última tendencia que se ha impuesto en algunos centros de trabajo y que empresas como Amazon, BP o Tesco han empezado a poner en marcha para medir la eficacia y productividad de sus plantillas.
Una nueva tendencia que preocupa a organizaciones sindicales como UGT, ya que según expresa en un comunicado, el uso de estas tecnologías puede poner en peligro la intimidad de los trabajadores y distorsionar las relaciones laborales.
El sindicato explica que estos wearables permiten hacer un seguimiento pormenorizado de las actividades de sus trabajadores, de su localización física en cada momento e incluso controlar «de forma exhaustiva» la duración de sus descansos. Por este motivo ha pedido una regulación de este tipo de dispositivos y su uso en las empresas.
En España no existe aún una normativa «clara y de referencia» para el uso de esta tecnología que proteja al trabajador de «los peligros inherentes al uso malintencionado de sus datos personales», lo que puede produce un «peligroso vacío legal», según UGT.
La organización ha advertido de que el uso de este tipo de herramientas puede desembocar en una hiperconectividad laboral que «rompa las barreras entre la vida personal y profesional» y que alejaría al país del derecho a la desconexión laboral. Por todo esto, UGT ha afirmado que exigirá que se establezcan límites y normativas que vigilen el funcionamiento de los wearables, su impacto sobre las condiciones laborales y la eficacia real que tienen.