La nueva reforma de los planes de pensiones tiene como objetivo fomentar el empleo joven y estimular su inversión. Los Ministerios de Economía y Hacienda plantean el rescate del dinero depositado en los planes de pensiones con más diez años de antigüedad desde 2025. Este caso de rescate se une a los de paro de larga duración, amenaza de desahucio de vivienda y enfermedad grave. Y aquí es donde entran en juego los autónomos.
Los trabajadores por cuenta propia y los contribuyentes podrán recuperar en siete años el fondo depositado del plan así como los rendimientos generados si tiene más de diez años de antigüedad, sin límite de cuantía.
Existen tres opciones para recuperar el plan de pensiones:
- Rescate de la totalidad del capital, el 100%, con un solo movimiento
- Rescate de forma periódica como renta
- Rescate mixto que aúna las dos formas anteriores. En este caso el ahorrador recibe una primera parte del capital y luego una renta periódica.
La tributación del rescate de un plan de pensiones es notablemente diferente al de las aportaciones. En el último caso, la inversión reduce la base imponible del IRPF con el límite de 8.000 euros o el 30% de los rendimientos netos. El objetivo, reducir el pago de impuestos y favorecer el ahorro.
Por el contrario, con el capital rescatado de un plan de pensiones las consecuencias son las contrarias. Está considerado rendimiento del trabajo y aumenta la base imponible del IRPF aumentando el coste de la factura fiscal. Es decir, a más ingresos derivados de los rendimientos, más impuestos hay que pagar.
Estos son los tramos actuales de retenciones del IRPF:
- 0 a 12.450 € = 19 %
- 12.451 € a 20.200 € = 24 %
- 20.201 € a 35.200 € = 30 %
- 35.201 € a 60.000 € = 37 %
- Más de 60.001 € = 45 %
Este nuevo supuesto para rescatar los planes de pensiones con más de una década hace pensar que desde 2025 puede haber una considerable salida de dinero de las entidades. No obstante, esto depende en gran parte de la situación económica del momento y de la evolución de un sistema de pensiones que ahora mismo está en entredicho.
Según informa el Ministerio de Economía, el pasado 31 de diciembre se habían acumulado 68.000 millones de euros en planes de pensiones, cifra que podría ser la que se retirara en 2025.
Hay que tener en cuenta que los planes de pensiones son productos de ahorro e inversión que tienen como objetivo complementar la pensión de jubilación de los autónomos que ya tienen uno. No obstante, a día de hoy no existen fondos de pensiones específicos para estos trabajadores y su rentabilidad fiscal es idéntica a la del resto de ahorradores.
La pensión media de un jubilado autónomo es de apenas 710 euros. Una vez más, la diferencia es abismal con la pensión media de los asalariados, que según el Instituto Nacional de Estadística (INE) es de 1209,07 euros.
Por ello, los planes de pensiones para autónomos son fundamentales para este colectivo. A menor cobertura de la pensión pública respecto el salario, más alto debera ser el ahorro privado para mantener el mismo nivel de vida.
El 80% de los autónomos suelen optar por cotizar por la base mínima, lo que supone una merma de sus prestaciones, entre ellas la pensión de jubilación.
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