Los últimos datos publicados han confirmado que el número total de aplicaciones disponibles en la App Store se redujo en 2017 frente a los datos de 2016, un hecho que tiene una explicación muy sencilla y es que Apple ha endurecido las políticas de su conocida tienda de aplicaciones.
Dicho de una manera simple estamos ante un claro ejemplo de calidad antes que cantidad, una máxima que se ha aplicado siempre en la App Store aunque es cierto que se endureció de forma notable durante el año pasado.
Sus efectos son evidentes; a principios de 2017 habían disponibles 2,2 millones de aplicaciones en la App Store y al cierre de 2017 dicha cifra bajó a 2,1 millones de aplicaciones. La reducción de aplicaciones se debió a esa priorización de calidad sobre cantidad, pero también debemos tener en cuenta que la llegada de iOS 11 marcó un salto importante por el abandono de los 32 bits que se ha dejado notar.
Echando un vistazo a los resultados de nuevas aplicaciones lanzadas durante los últimos años en la tienda de aplicaciones de Apple vemos una reducción drástica entre las que llegaron en 2016 y en 2017, ya que tenemos una bajada aproximada de 250.000 aplicaciones (más de un millón frente a 755.000 aplicaciones).
Comparando con Android en 2017 llegaron a la Google Play Store alrededor de un 1,5 millones de nuevas aplicaciones, cifra que dobla los resultados de la App Store. En total de aplicaciones disponibles la diferencia también es muy marcada, ya que la tienda de aplicaciones de Android superó en 2017 la barrera de los 3,5 millones de aplicaciones.
Siendo realistas debemos tener claro que iOS es una plataforma muy completa y que la App Store ofrece todas las aplicaciones profesionales que podáis llegar a necesitar, así que en la práctica la diferencia cualitativa que marca ese mayor número de aplicaciones disponibles en Android es prácticamente inexistente.