El uso de máquinas virtuales se ha visto potenciado con el paso de los años, algo que ha sido posible no solo por las mejoras que se han introducido a nivel de optimización y de rendimiento, sino también gracias los avances que se han producido en términos de hardware y de soporte.
Hoy es posible encontrar en el mercado equipos potentes y económicos que cuentan con todo lo necesario para facilitarnos el uso de máquinas virtuales, aunque el rendimiento puede variar no solo en función de los componentes de dichos equipos, sino también de la configuración que utilicemos.
Nuestros compañeros de MuyComputer han publicado un interesante artículo en el que nos dejan un total de diez consejos con los que podremos mejorar el rendimiento de máquinas virtuales de una manera sencilla y rápida, y sin tener que gastar dinero.
Podéis consultar el artículo completo a través el enlace que os hemos dejado arriba, pero a continuación os dejamos un resumen simplificado de tres de esas diez recomendaciones que se pueden aplicar casi al instante y que tendrán un gran impacto en el rendimiento, y que por tanto deberían ser las primeras a poner en práctica:
- Asignar más recursos: hablamos tanto de núcleos de la CPU como de memoria RAM, dos elementos fundamentales que determinan en todo momento el rendimiento que disfrutaremos al utilizar máquinas virtual, aunque debemos mantener siempre un equilibrio para no perjudicar a nuestro sistema operativo principal.
- Utilizar una unidad de almacenamiento rápida: si nuestro equipo cuenta con varias unidades de almacenamiento, como por ejemplo un disco duro SATA III a 7.200 RPM y un SSD PCIE x4, optar por la segunda puede marcar una diferencia importante.
- Ajustar la configuración de vídeo: configurar las opciones de aceleración 2D y 3D y asignar una determinada cantidad de memoria gráfica puede ayudar a mejorar el rendimiento de forma significativa.