En febrero del año pasado os contamos que Microsoft iba a llevar Windows Defender ATP (Advanced Threat Protection») a los sistemas operativos Windows 7 y Windows 8.1, un movimiento importante ya que dicha solución de seguridad se mantiene como una de las más relevantes a nivel profesional cuando hablamos de entornos basados en Windows.
A día de hoy Windows 10 es la prioridad de Microsoft, de esto no hay duda. Sin embargo, el gigante de Redmond no ha querido dejar de lado a Windows 7 y Windows 8.1, dos sistemas operativos que todavía reciben soporte oficial, y que mantienen una cuota de mercado bastante importante, sobre todo el primero.
Windows 7 se mantiene como el segundo sistema operativo más popular del gigante de Redmond, ya que posiciona por detrás y a poca distancia de Windows 10. Con esto en mente es perfectamente comprensible que Microsoft haya decidido extender el soporte de Windows Defender ATP.
Windows Defender ATP se define como un conjunto de herramientas de seguridad que integra soluciones como Defender Application Guard, Defender Device Guard y Defender Antivirus. Su objetivo es actuar de forma plena y unificada a través de un conjunto de capas que trabajan en varios niveles:
- Preventiva: evita infecciones y brechas de seguridad.
- Identificativa: puede detectar infecciones, ataques avanzados y filtraciones de datos.
- Investigación y respuesta automatizada: permite establecer rutinas de investigación y de actuación concretas.
Como anticipamos Microsoft ha ampliado la lista de sistemas operativos compatibles, de manera que Windows Defender ATP ahora funciona también con Windows 7 Service Pack (SP) 1 Enterprise, Windows 7 SP1 Pro, Windows 8.1 Enterprise y Windows 8.1 Pro.
Os recordamos que Windows Defender ATP es una herramienta opcional, y que aunque decidamos utilizarla asociada a Windows 7 esto no cambiará la fecha de fin de soporte de dicho sistema operativo, que sigue marcada para enero de 2020. Microsoft ofrecerá soporte extendido de pago una vez que llegue dicha fecha, pero lo ideal es que empecéis a trabajar en un proceso de migración si utilizáis dicho sistema operativo, ya que los plazos de soporte extendido estarán limitados a un máximo de tres años y se encarecerán con con cada anualidad cumplida, como vimos en este artículo.