Toda crisis supone una oportunidad y la irrupción del COVID-19 ha dejado tocado al mundo del fitness pero no hundido. El sector ahora debe encontrar la manera de ser más seguro, competitivo y ofrecer experiencias únicas cuando, todavía, no se ha recuperado del cierre por la pandemia. Todo apunta a que el uso de córners por parte de gimnasios ya existentes va a marcar la diferencia, ya que les permite reinventar su negocio con con una inversión razonable.
Brooklyn Fitboxing, ha decidido apostar por ese sistema para seguir creciendo en mercados donde no se plantea la apertura de clubs. Nace así F3 Fitboxing, una solución que incorpora el sistema de entrenamiento creado por la empresa española en 2014, en el que se une el fitboxing, boxeo sin contacto junto con distintas técnicas de artes marciales, con la tecnología de sus sacos, que permite hacer un seguimiento de la clase y dar una puntuación a cada uno de los participantes.
Además, el sistema incorpora la música creada especialmente para su entrenamiento, los sensores de los sacos, la alternancia de los rounds con el saco y los ejercicios funcionales y el plato fuerte, la gamificación. Gracias a la puntuación que se da a cada usuario al final de la clase puede ver su evolución e incluso competir con otros fitboxers.
“Estamos lanzando en Estados Unidos, Alemania, Italia, Canadá y Latinoamérica. Hemos reservado ciertas zonas de esos países para franquicias Brooklyn Fitboxing, pero el resto del territorio es nuestro mercado para F3”, explica María Blanco, directora de operaciones de F3.
Pese a estar en un momento delicado en el que el sector mira con expectación cómo le va a afectar el COVID-19 y las medidas de seguridad que parecen haber llegado para quedarse, la aceptación del proyecto ha sido buena. “Las primeras conversaciones que se están manteniendo son muy satisfactorias, el producto encaja a la perfección y lo ven como una oportunidad de diferenciación con una inversión muy asequible”, asegura Blanco.
F3 no se centra únicamente en instalaciones deportivas ya existentes. Empresas que quieran montar gimnasios corporativos y hoteles son otros sectores a los que se está presentando. Así, la perspectiva de crecimiento es llegar a los 500 centros en el mundo en 5 años.
Además, todos los fitboxers podrán participar en los Fitboxing World Games donde se darán cita los 64 mejores equipos de todo el mundo, tanto de clubs Brooklyn Fitboxing como córners de F3 para competir por el cinturón de campeón del mundo de fitboxing. Su nueva propuesta fitness va más allá de la simple puesta en forma y pretende implicar al usuario a nivel emocional. “Estamos creando una gran tribu de fitboxers en todo el mundo”, explica Juan Pablo Nebrera, CEO de Brooklyn Fitboxing International.