El lanzamiento de la serie Galaxy S21 ha marcado un importante punto de inflexión en el sector smartphone. Con esta nueva generación, Samsung ha demostrado que sabe cómo innovar en un sector cada vez más competitivo, y que sigue siendo capaz de crear valor para el usuario, yendo más allá del diseño y de la potencia bruta.
A simple vista, la serie Galaxy S21 destaca por su cuidado diseño y su alta calidad de construcción. Si miramos las especificaciones, no hay duda de que esta generación representa un gran paso adelante, gracias a las mejoras que ha introducido Samsung en componentes tan importantes como la configuración de cámaras, con la introducción de un nuevo sensor de 108 MP en el Galaxy S21 Ultra, y en el SoC, gracias al nuevo chip Exynos 2100, fabricado en el innovador proceso de 5 nm.
La serie Galaxy S21 alcanza la excelencia en términos de diseño, de calidad de construcción y de rendimiento, pero también lo hace en materia de seguridad. Samsung ha implementado, en esta nueva generación de smartphones, su conocida suite de seguridad Samsung Knox, y lo ha hecho centrándose en un gran objetivo: proteger nuestros datos, tanto cuando los tenemos almacenados en nuestro dispositivo como cuando decidimos compartirlos.
Samsung Knox Vault y Private Share
Piensa, por un momento, en todos los datos, y en toda la información sensible, que llevas a diario en tu smartphone. Fotos, mensajes, documentos, archivos de diversa índole, información de registro (contraseñas y nombres de usuario), conversaciones privadas, números de teléfono, direcciones y un largo etcétera.
Ahora piensa en qué ocurriría si esos datos cayesen en malas manos. Las consecuencias podrían ser desastrosas, ¿verdad? Samsung es consciente de la importancia que tiene el smartphone como compañero de aventuras, y de trabajo, en nuestro día a día, y también del papel que juegan los datos como consecuencia del uso natural de dicho dispositivo. Todos esos datos deben estar debidamente protegidos, una realidad que representa un desafío muy importante al que la compañía ha sabido responder con Samsung Knox Vault y Private Share.
Samsung Knox Vault es una plataforma de seguridad que trabaja a nivel de hardware, es decir, que está presente a nivel de chipset (SoC Exynos 2100). Los sistemas de seguridad que se implementan a nivel de hardware son mucho más fiables, y más difíciles de vulnerar, que aquellos que se establecen a nivel de software. Gracias a esta plataforma, los Galaxy S21 integra una configuración de memoria segura que está protegida contra manipulaciones, y que cuenta además con una capa de seguridad adicional a nivel de procesador que es capaz de mantener a salvo todos nuestros datos, incluyendo nuestra clave privada de Blockchain y nuestras credenciales de uso de diferentes aplicaciones y soluciones de pago, como Samsung Pay, por ejemplo.
Private Share es una herramienta muy interesante que refuerza la seguridad de la serie Galaxy S21, y que complementa de maravilla a la plataforma Samsung Knox Vault. Con Private Share, podremos proteger y controlar nuestra privacidad, gracias a un mayor control de los metadatos de archivos tan importantes como fotos y vídeos. Así, cuando decidamos compartir este tipo de archivos, podremos eliminar de forma totalmente segura los metadatos de ubicación. Pero esto no es todo, con Private Share también podremos controlar quién tiene acceso a los archivos que compartimos, y limitar el tiempo durante el que estarán disponibles.
Samsung Knox para empresas: toda la seguridad que tu pyme necesita
El creciente uso del smartphone en entornos profesionales ha disparado la importancia de las soluciones de seguridad dedicadas capaces de cubrir, en sentido amplio, todas las necesidades del sector. Samsung Knox se ha adaptado a esa realidad, y gracias a ello se ha convertido en una solución integral que puede ofrecer una protección plena, perfectamente integrada y sin que sea necesario incurrir en complicados procesos de configuración y de integración.
La plataforma Samsung Knox para empresas está diseñada para proteger el smartphone desde que se enciende hasta que se apaga. Samsung Knox protege el terminal a nivel de aplicaciones y de datos. Para ello, utiliza definiciones estrictas que rigen, en todo momento, qué puede hacer y qué no puede hacer cada uno de los procesos del sistema, y fija también los límites de los datos a los que estos pueden acceder. De esta manera se evitan problemas derivados de intrusiones y accesos no autorizados, y se reduce el riesgo de ataques maliciosos.
Esta plataforma también añade una capa de protección adicional, generada gracias a la separación, el cifrado y la protección de los datos profesionales del smartphone en un contenedor aislado, concreto y totalmente administrado, facilitando una marcada separación entre el lado personal de nuestro smartphone y el lado profesional. A esto debemos unir, además, otras funciones como el arranque seguro del sistema, que los administradores de TI podrán controlar por completo, y el respaldo que ofrece la arquitectura “ ARM Trust Zone” (zona de confianza), que permite crear dos mundos: el mundo normal y el mundo seguro. Las aplicaciones y procesos normales funcionarán en el mundo normal, mientras que las tareas y procesos confidenciales e importantes se ejecutarán en el mundo seguro.
