Pese a la situación económica actual, caracterizada por la inflación y la incertidumbre, el comercio electrónico ha experimentado desde principios de año una actividad bastante positiva.
Muchas empresas del sector supieron adelantar pedidos para preparar las campañas clave de Black Friday y Navidad y, con ello, proteger sus márgenes. Sin embargo, el buen inicio de año ha quedado atrás y el sector empieza a verse cada vez más afectado por la persistencia de la inflación.
«La principal consecuencia de este impacto se materializa en los márgenes, que se ven estrechados al tener que afrontar costes mayores. Esta reducción de los márgenes se va a traducir en un incremento de los precios finales y en una reducción de los descuentos ofrecidos en días clave para el sector, como el Single’s Day o el Black Friday», asegura Marc Brichs, responsable de Wayflyer para España.
Asimismo, el pasado 1 de octubre se puso fin al código bancario de buenas prácticas que se estableció con la irrupción de la pandemia del coronavirus. Esta fecha marcará el inicio del endurecimiento del crédito y de la financiación bancaria, por lo que los vendedores de comercio electrónico que no cuenten con recursos alternativos, se verán limitados a la hora de operar.
«Estas limitaciones se traducirán especialmente en falta de liquidez, cuya importancia a aumentará a medida que lo hagan las pujas publicitarias de las principales plataformas. Este es un factor fundamental a la hora de determinar el éxito de una campaña porque de ello depende en gran medida el tráfico web necesario para alcanzar las rentabilidades necesarias», añade Marc Brychs.
Restricción de crédito y mayores costes de financiación
El escenario, que ya de por sí es complejo, se hará todavía más complicado a medida que se restrinja el crédito y se eleven los costes de financiación, por lo que es muy importante que los vendedores de comercio electrónico conozcan todas las alternativas disponibles para acceder a liquidez sin presionar el circulante en sus balances.
Estas opciones les permitirán aprovechar las oportunidades de crecimiento, que siguen estando vigentes, y demostrar su capacidad para sobreponerse a entornos complejos, como ya hicieron durante la pandemia o con los problemas en las cadenas de suministro global que se han dado desde entonces.
De hecho, las compañías que supieron aprovechar las soluciones de liquidez a tiempo fueron capaces de adelantar pedidos de cara a la temporada clave para el sector y con ello proteger sus márgenes de la inflación.
