El futuro del trabajo pasa por la colaboración entre los robots y los humanos. Tras muchos años integrando la tecnología en las dinámicas de trabajo, la llegada de los robots colaborativos, o cobots, es una realidad, potenciando no solo la seguridad en el entorno laboral, sino la productividad y eficiencia de las empresas.
Estos robots colaborativos están saliendo de las zonas de producción en las que han estado confinados para colaborar con operarios humanos. En este sentido, Eduardo Benito, experto en desarrollos embebidos en ERNI Consulting España explica que “un robot pasa a considerarse un cobot cuando puede trabajar en colaboración con los humanos sin suponer un riesgo para su seguridad, brindándoles asistencia en diferentes tareas y procesos y sin la necesidad de estar físicamente separados”.
Precisamente, en el congreso mundial Advanced Factories celebrado en Barcelona este 2023, se presentó la nueva generación de cobots: “A los robots se les ha dotado de inteligencia y autonomía para poder colaborar en trabajos con los humanos. De esta forma, gracias a tecnología como las Smart Cameras o los sensores de proximidad, el cobot puede detenerse o reducir su velocidad de trabajo cuando hay humanos cerca, evitando posibles accidentes”.
Además, Benito añade que “los cobots son especialmente útiles para realizar tareas repetitivas, que no implican creatividad ni improvisación, pero que requieren de una gran precisión o un esfuerzo físico que podría provocar lesiones si se realizan continuamente”.
Las Smart Cameras optimizan la interacción con los humanos
En estos casos, las cámaras inteligentes de visión por computador permiten a los cobots obtener información visual del entorno que les rodea. “Les da la capacidad de reconocer objetos, detectar y seguir personas, identificar colores y formas, y realizar tareas de navegación y manipulación basadas en la visión”, señala Benito.
Las cámaras inteligentes también ayudan a los robots a evitar obstáculos, mejorar la seguridad y optimizar la interacción con los humanos. Pueden detectar y evitar colisiones, reconocer expresiones faciales y gestos, y proporcionar una comunicación más natural y efectiva.
Los cobots también pueden ofrecer un alto nivel de precisión en sus tareas, por lo que son muy eficaces en el ámbito médico. Desde ERNI Consulting España, experta en dispositivos médicos inteligentes, se colaboró con una empresa especializada en el desarrollo de robots para cirugía mínimamente invasiva. Se trata de robots de última generación diseñados para ayudar a los cirujanos a realizar operaciones más precisas y eficientes.
Sin embargo, Benito destaca que lo más importante es que la incorporación del cobot al lugar de trabajo se acompañe de un análisis exhaustivo de riesgos con el objetivo de minimizar accidentes y evitar posibles incidencias entre el cobot y el operario humano.
De esta manera, contamos con la certificación ISO 10218-1, que se enfoca en los aspectos vinculados con la seguridad en cuanto a los robots industriales, proporcionando directrices para el diseño, construcción e integración de los sistemas robóticos en los entornos de trabajo y garantizar la seguridad de los operadores y personas que trabajan cerca de los robots.