Desde hace años, el sector de la bicicleta vive una transformación profunda y los datos confirman que en España se venden más bicicletas que turismos y el último año no ha sido la excepción, según datos de la Asociación de Marcas y Bicicletas de España (AMBE) y la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC). Fue en 2022 cuando se dio una mayor diferencia en ventas entre bicicletas y coches. Ese año marcó un punto de inflexión en la evolución del transporte personal y reflejó el avance hacia una movilidad más sostenible, activa y saludable. El interés por la bicicleta se mantiene firme y sigue superando en unidades vendidas.
La pandemia marcó el cambio para el sector. En 2021, con más de 1,57 millones de bicicletas vendidas, se alcanzó un récord histórico en España. Desde entonces, el mercado ha experimentado una normalización, con un descenso del 13,6 % en 2022, del 10,1 % en 2023 y del 9,8 % en 2024, año en el que se vendieron 1.240.000. Aun así, la venta de bicis continúa superando a la de automóviles. Solo en el último año se vendieron 85.000 bicicletas más que coches en España. Esto demuestra que ya no es una alternativa marginal, sino una opción de movilidad mayoritaria para muchas personas, según indican desde Youin.
Factores que explican el impulso de la bicicleta como alternativa
Por tanto, el auge de la bicicleta en España se debe a una conjunción de factores sociales, tecnológicos y económicos. Por un lado, el cambio en los hábitos urbanos ha impulsado el uso de medios de transporte más sostenibles, con muchas ciudades implementando carriles bici, zonas de bajas emisiones y políticas que favorecen el ciclismo como forma cotidiana de desplazamiento.
“A esto se suma el crecimiento exponencial de la bicicleta eléctrica, que ha ampliado el acceso a este medio de transporte para públicos más diversos y permite trayectos más largos sin requerir un gran esfuerzo. Así, están haciendo que cada vez más personas se animen a dejar el coche en casa y pasarse a una movilidad eficiente, silenciosa y ecológica”, explica Daniel Isus, director comercial de Youin.
Desafíos y frenos a la movilidad sostenible sobre dos ruedas
A pesar del crecimiento en ventas y del interés social creciente, el sector ciclista aún enfrenta importantes obstáculos estructurales. Uno de los principales es la falta de incentivos fiscales. Hasta ahora, a diferencia de los vehículos eléctricos, las bicicletas no están incluidas en planes estatales de ayudas económicas. Esta situación limita su adopción por parte de muchos potenciales usuarios.
“Además, el elevado IVA del 21 % encarece notablemente la adquisición de bicicletas, y organizaciones del sector reclaman su reducción al 10 % o incluso a un tipo superreducido. A esto se suma la carencia de infraestructuras adecuadas en numerosas ciudades, donde las redes ciclistas son todavía discontinuas, poco seguras o inexistentes”, comenta Daniel Isus, director comercial de Youin.
Sin embargo, existen varios de los incentivos clave para consolidar el uso de la bicicleta en España están actualmente en fase de planificación o implementación, según detalla el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible en su estrategia nacional. Entre ellos destacan las ayudas directas a la compra de bicicletas eléctricas, que cubrirán hasta un 60 % del coste, con límites que van desde los 1.700 € para las convencionales con pedaleo asistido, hasta los 4.000 € en el caso de ciclos de carga, tanto para particulares como para empresas.
Asimismo, se contempla una inversión de 20 millones de euros en 2025 destinada a reforzar los sistemas públicos de préstamo en entidades locales, con descuentos del 30 % en abonos. También está en marcha la creación de un Real Decreto para fomentar la intermodalidad bici-tren, con el objetivo de asegurar espacios adecuados para bicicletas en trenes y estaciones, y así también facilitar el acceso al turismo de bicicleta en zonas poco accesibles en transporte público.
No obstante, buena parte de estas medidas aún están pendientes de ejecución o dependen de futuras convocatorias, lo que subraya la necesidad de un compromiso político decidido y una mayor agilidad administrativa para transformar estas intenciones en una red ciclista funcional y ampliamente accesible además de acciones y medidas efectivas en todos los ámbitos institucionales.
