Los Ministros de Cultura de la Unión Europea apostaron ayer por desarrollar un turismo cultural respetuoso con el medioambiente y sostenible como «motor» de la economía local y regional, en las conclusiones que adoptaron en el Consejo de Cultura de la UE celebrado en Bruselas.
Los ministros invitaron a los gobiernos a reforzar el papel que desempeña la cultura en la políticas de desarrollo local y regional, en lo que respecta a las infraestructuras, la regeneración urbana, la diversificación rural o el turismo, entre otras cuestiones.
Además, recomiendan que se fomente un ambiente «propicio» para un mejor desarrollo de las industrias culturales y creativas, en especial las pymes, a través de iniciativas como facilitar la financiación o la creación de una «cantera» de estas empresas a nivel regional y local.
Respecto al turismo cultural, un «elemento clave para un turismo respetuoso», los ministros recalcaron la importancia de animar la «revitalización de los recursos propios de una región», poniendo un acento particular en el patrimonio cultural (tangible e intangible), las expresiones culturales y las actividades análogas.
También sugieren reforzar la imagen que la cultura puede brindar a una región y la promoción de una educación sobre el medioambiente y la necesidad de proteger el patrimonio cultural y natural, con medidas destinadas a concienciar a los turistas de que adopten una «actitud responsable».
Impulsar la creatividad en el ámbito educativo, así como las enseñanzas relacionadas con la cultura para mejorar el «capital humano» y reforzar la cooperación dentro de la UE y a nivel extracomunitario, son otras de las medidas mencionadas en el texto.
Una de las iniciativas concretas que la UE pretende poner en marcha en este ámbito es el Sello del Patrimonio Europeo, una denominación destinada a aumentar el atractivo turístico de los lugares que lo reciban y fomentar la identidad comunitaria.
El sello nació en 2006 como un proyecto intergubernamental entre 17 estados miembros y otros 3 países del continente europeo.El Ejecutivo comunitario propuso en marzo su reconocimiento oficial en toda la Unión Europea, con vistas a dotar a la etiqueta de unos criterios de calidad definidos y recursos financieros propios.
En la actualidad, 64 lugares han recibido la etiqueta; entre ellos España, que aporta el cabo de Finisterre, el archivo de la Corona de Aragón, la Residencia de Estudiantes (Madrid) y el Monasterio de Yuste