El 80% de los españoles estarían dispuestos a pagar con tarjeta de débito en lugar de efectivo si fuese más aceptada (sobre todo en los pequeños comercios) y segura, según un estudio elaborado por TNS para MasterCard.
Así, a pesar de que la tarjeta de débito goza de una elevada implantación entre los españoles de 18 a 55 años, ya que el 82% de la población declara tener al menos una, sigue siendo un método de pago minoritario, ya que apenas un 15% la usa diariamente, utilizando en su lugar el pago en efectivo.
Entre los cambios más demandados a su uso, tres de cada diez de los encuestados reclaman poder usarla para compras de importe más pequeño y otro 27% que sea más aceptada por los comerciantes.
La seguridad preocupa a un 21% de los españoles, que declara que usaría más el débito si fuera menos propenso al fraude, y aspectos como la rapidez, la posibilidad de obtener descuentos o que no tenga un coste adicional aparecen también entre las principales motivaciones para cambiar a la tarjeta de débito.
Además, a igualdad de condiciones, el español declara preferir el efectivo en la mayoría de las ocasiones. Sin embargo, se encuentran casos que se decantan por el uso del débito cuando tiene que adquirir ropa o gasolina.
En lo que respecta al aspecto determinante para escoger el modo de pago figura el importe a pagar, ya que para cantidades inferiores a 25 euros el efectivo es el principal medio de pago para el 70% de los encuestados, mientras que entre esa cantidad y los 100 euros es cuando más se utiliza la tarjeta de débito.
Respecto a la frecuencia en el uso de la tarjeta de débito, menos de la mitad de los españoles que poseen una tarjeta de débito le da uso semanal (42%) y un 33% declara que sólo la usa mensualmente. En comparación con el resto de países, España se encuentra en un nivel similar al de Italia, destacando el uso diario del 15% de la población estudiada.
En lo relativo al sexo del usuario, las mujeres presentan un mayor uso diario de la tarjeta de débito (un 19% la usa diariamente, frente al 12% de los hombres), mientras que semanal o mensualmente no se presentan diferencias relevantes entre sexos.
Los principales motivos por los que los españoles prefieren usar la tarjeta de débito están relacionados con la comodidad: no cargar con efectivo, poder pagar siempre sin necesidad de ir al cajero o al banco y la rapidez.
Otros motivos para escoger este modo de pago son el hecho de que no haya costes adicionales, el control de los gastos que permite realizar y la posibilidad de obtener beneficios adicionales como descuentos, puntos, etc.
