Un informe de BBVA Research, elaborado por su economista jefe, Jorge Sicilia, revela que sólo 8 de cada 100 pequeñas y medianas empresas llegan a convertirse en una grande. Uno de los principales problemas, es que para las pymes el acceso a la financiación es un problema. Una traba que no comparten con las empresas de mayor tamaño, que acceden al crédito más fácilmente.
Pero las compañías de menor tamaño no sólo tienen el problema del acceso a la financiación. También es más difícil para ellas internacionalizarse, cuando la demanda nacional en España está completamente parada y la única vía para seguir creciendo es vender en el exterior. Según el informe, sólo el 34% de las empresas que estaban activas hace 20 años continúa estándolo en la actualidad.
El principal motivo de que les cueste más a las pymes españolas exportar que a otros países, es debido a que el proceso es más caro y más burocrático que en la media de los Estados europeos, aunque tardan menos en número de días. De acuerdo con los datos de BBVA Research, los costes relacionados con la exportación en euros en 2011 ascienden a 1221, casi el doble de lo que ocurre al otro lado de la frontera, en Portugal, donde la cifra se queda en 685 euros.
Además, el número de documentos que se requiere para conseguir vender en otros mercados es el mayor entre los países de la Unión, según los datos del servicio de estudios de BBVA a partir de los informes de la Unión Europea.