El Gobierno ha presentado las bases de la nueva Formación Profesional Dual, una nueva forma de pensar la formación y que se inspira en el modelo alemán, al combinar la formación que se recibe en los centros con las prácticas en empresas.
Por otro lado también se ha aprobado el nuevo Contrato de Formación y Aprendizaje, que ya se recogía en la reforma laboral. Estas dos medidas, según Soraya Sáenz de Santamaría, pretenden «mejorar la formación y hacerla más profesional» y asegura que permite a los jóvenes «tener una formación que esté más vinculada a la empresa».
La primera parte del texto, la del contrato para la formación y el aprendizaje, elaborado por el Ministerio de Empleo, regula un modelo alternativo a la educación reglada, que compatibiliza la formación con el trabajo, de manera que permite que un trabajador sin título pueda convalidar sus conocimientos con créditos de módulos de Formación Profesional de grado medio o superior.
La segunda parte, inspirada en el modelo alemán y desarrollada por el Ministerio de Educación, establece las bases de la Formación Profesional Dual en el sistema educativo, combinando los procesos de enseñanza y aprendizaje en la empresa y en el centro de formación. En este caso, serán las administraciones educativas autonómicas las encargadas de firmar convenios con las empresas donde los alumnos reciban formación práctica y remunerada.
Entre las principales novedades del Contrato para la Formación y el Aprendizaje, se establece que debe formalizarse por escrito y tendrá una duración mínima de un año y máxima tres, pues más allá de este plazo el contrato deberá ser indefinido ordinario.
La ministra de Empleo, Fátima Báñez, ha indicado que este modelo contractual está orientado para los trabajadores entre los 16 y 30 años, debido a que la tasa de paro es «muy alta» entre este colectivo. Asimismo, ha indicado que se trata de un contrato de «máxima protección social», incluida la protección por desempleo, y no de un «contrato basura a los jóvenes».
El tiempo para la formación es un mínimo del 25 por ciento de la jornada laboral en el primer año y en los siguientes será del 15 por ciento. Los centros donde podrán recibir la formación son, indistintamente, los 6.000 de Formación Profesional, los 7.000 del sistema educativo o bien en la propia empresa, si tiene un centro homologado con los servicios de empleo estatales.
FP Dual: persiguiendo el modelo alemán
El ministro de Educación, José Ignacio Wert, ha explicado la otra pata del decreto, la FP Dual que a su entender, persigue una mayor «empleabilidad cualificada» entre los jóvenes españoles, así como reducir el abandono escolar temprano, que supera el 26 por ciento frente al 15 por ciento de la media europea.
La diferencia entre este nuevo sistema y el que actualmente se imparte en los ciclos de grado medio y superior es que ahora, la proporción entre el tiempo entre formación y prácticas es más amplio con la FP dual, pues aquí la formación en el centro de trabajo tiene que ser como mínimo del 33 por ciento y la duración de los ciclos pueden llegar hasta los tres años.
«Al final de este proceso, los estudiantes van a tener el mismo título que los del sistema vigente, pero durante este tiempo habrán estado adquiriendo una experiencia profesional que es un valor añadido», ha dicho el ministro, que ha señalado que se trata de «más vinculación con la empresa, más perspectiva de estabilidad y progresión en la carrera profesional».
El titular de Educación ha dicho que los convenios se realizarán entre las empresas y los centros de FP, al tiempo que ha señalado que la FP dual no supone un contrato laboral y que los alumnos no cuentan con Seguridad Social, ni un salario.