Hace unos meses que en el seno del Gobierno se está estudiando la posibilidad de que los trabajadores que cumplan una serie de requisitos, puedan compaginar el cobro de un un sueldo privado con su pensión de jubilación. Aunque los detalles todavía no están claros, lo que es seguro es que en cualquier caso, esto sólo sería posible cuando el trabajador haya cumplido la edad de jubilación legal y haya cotizado el número de años obligatorio para tener derecho a la percepción del 100% de la base reguladora.
Así consta en el ‘Informe sobre la compatibilidad de la percepción de la pensión de jubilación y la realización de una actividad’ que la directora del Instituto Nacional de Seguridad Social (INSS), María Eugenia Martín Mendizábal, entregó a los partidos con representación en el Pacto de Toledo durante la reunión que mantuvieron la semana pasada.
El informe propone que las personas que quieran alargar su vida laboral también deberían acreditar que han cubierto el periodo de cotización requerido para poder percibir el 100% de la base reguladora de la pensión.
El informe defiende además las razones que hacen necesario un cambio normativo para «eliminar las fuertes rigideces del actual ordenamiento» que suponen un «freno a la potenciación de la presencia más activa de los trabajadores de más edad en la sociedad».
Así, alude a la sostenibilidad del sistema público de pensiones, que cada vez tiene un mayor número de beneficiarios con retribuciones más altas y que «han de abonarse durante más tiempo» lo que hace que sea «básico» retrasar la edad efectiva de acceso a la pensión de jubilación.
«La regulación actual no es la más idónea», asegura el Gobierno, que alega que el «escaso éxito» cosechado con las fórmulas recogidas actualmente en la normativa española se debe a su «descoordinación» y que provocan «diferencias no justificadas» entre los diferentes casos.
