Actores como Vodafone están convencidos de que la tecnología M2M, el Internet de las cosas, está aquí para quedarse. Esto no quiere decir que el despliegue de esta tecnología no se esté produciendo más lentamente de lo que les gustaría, o que no haya escenarios (principalmente en medianas y grandes empresas) en el que el despliegue de soluciones M2M no esté experimentando algunas dificultades.
Es lo que esta semana ha reconocido Niklas Ekarv, M2M Regional Business Director APAC for Vodafone Global Enterprise, quien además ha reflexionado en voz alta sobre algunos de los desafíos del M2M y cómo ve el futuro de esta tecnología. Recogemos en este artículo, algunas de sus declaraciones más interesantes.
«Muchas veces me preguntan sobre las barreras de adopción, qué es lo que nos está frenando. ¿Puede que sea el coste del hardware? No, no creo que sea el coste del hardware. ¿Es entonces el coste de la conectividad? No, por lo menos en Vodafone no creo que tengamos ese problema. ¿Es la complejidad? Tal vez tenga algo que ver con esto último».
«De hecho cuando hablamos con clientes, lo que nos encontramos es que el principal obstáculo para la adopción no es la tecnología, ni siquiera la integración del producto, sino que para que realmente puedan extraer todo su potencial, la empresa necesita hacer un cambio en su proposición de valor. Y este es el gran desafío que tienen que superar para que el M2M se convierta en una tendencia mainstream».
«Las pequeñas empresas que no tienen procesos heredados, o que no tienen estructuras tan estáticas, son las que muchas veces sacan más partido de esta tecnología, porque pueden pensar ‘out of the box’ y ver cómo pueden cambiar su proposición de valor para sacar el máximo beneficio de esta tecnología desde el principio».