Pese a lo que muchas personas pueden pensar, el trabajo de un Community Manager va mucho más allá de medir la actividad de una empresa en Facebook o en Twitter. Ser Community Manager supone saber investigar, dominar las principales técnicas de marketing on-line, tener mucha creatividad y saber cómo interpretar los resultados que ofrecen las métricas, actuando en consecuencia. Para ejemplificarlo os mostramos cómo puede ser el día a día de un Community Manager, imaginando una teórica y muy completa jornada de trabajo.
8.00: calentando motores
Nuestro protagonista desayuna escuchando algún podcast. Para tenerlos bien organizados y no perderse ningún episodio esencial utiliza apps como Downcast (iOS9 o Pocket Casts (Android), que le facilitan además la tarea de descubrir nuevos contenidos relacionados con su sector. Poco después anota las ideas que se han ido ocurriendo a lo largo de la mañana en Evernote, muchas de las cuales se le han ocurrido al revisar agregadores de medios como Zite o Flipboard.
9.00: el momento más creativo
La primera hora de la mañana suele ser la ideal para la creatividad. Es cuando estamos más frescos y cuando deberíamos encarar nuestra tarea principal. En el caso de nuestro protagonista, puede que eche mano de WordPress para escribir lo que será el post del día, utilizando un espacio como Hubspot del que extraer buena parte de la información.
Además puede aprovechar ese momento para escribir y planificar otros artículos, utilizando para la planificación de publicaciones una herramienta como Postplanner (Facebook), o BundlePost.
10.00: revisión
Llega el momento de la revisar algunas de las acciones que hemos puesto en marcha el día anterior, o cómo está funcionando el trabajo desarrollado a lo largo de la semana pasada. Puede que queramos ver cómo ha funcionado nuestra última acción de e-mail marketing, probando con un programa como Infusionsoft o SalesForce.
Y si hablamos de revisar, llega el momento de monitorizar lo que la Red está diciendo de nuestra empresa. Servicios sencillos como Google Alerts nos ayudan a descubrir lo que se dice de nosotros en los medios, y otros como Mention o Viral Heat van más allá, explorando nuestra presencia en las principales redes sociales.
11.00: un merecido descanso y a por las redes sociales
A las once de la mañana nuestro protagonista se concede un pequeño descanso. Se toma una café y cuando vuelve a su puesto pasa unos minutos desconectando. Lo que más le gusta en esos momentos es revisar sus blogs favoritos en Feedly y comprobar qué han compartido sus contactos en Scoop.it.
Si descubre que algo de lo que lee es interesante y merece ser compartido con los fans de su empresa, lo comparte programándolo en Buffer. Y ya que está comienza a trabajar de nuevo y se mete de lleno en Hootsuite, la plataforma que su empresa ha escogido para gestionar su presencia en las redes sociales.
13.00: comer e investigar
A las 13.00 nuestro protagonista para para comer. Al terminar se toma cierto tiempo para invertir en su formación como experto en marketing social. Para ello recorre webs como Entrepreneur, Social Media Examiner, Techcrunch, Content Marketing Institute o MuyPymes, publicaciones que desde hace mucho tiempo nos cuentan cuáles son las mejores prácticas, herramientas y aplicaciones para nuestra estrategias de marketing on-line.
15.00: crear comunidad
Llega el momento de crear comunidad, interactuar con nuestros fans y conseguir atraer a nuevos usuarios. Comenzamos repasando los blogs de nuestra competencia, los más relevantes de nuestro sector, y aprovechamos que existen herramientas como Disqus, oara gestionar todos nuestros comentarios y cómo está siendo la participación de la comunidad.
Además nos aprovechamos de otras como Grouphigh o Little Bird para descubrir nuevos influencers dentro de nuestro sector, monitorizar los que ya lo son o descubrir a nuevos talentos que a lo mejor pueden llegar a trabajar para nosotros.
17.00 horas: analizar
La última hora de su jornada laboral, nuestro protagonista lo dedica a analizar. Comienza su repaso por Google Analytics y para después pasar a analizar la actividad de la empresa en otras redes gracias a herramientas como Tailwind (Pinterest) e investigar qué es lo que están haciendo sus cliente o qué es lo que más les interesa, gracias a una herramienta como Kissmetrics
