Septiembre puede ser un gran mes para poner en marcha un nuevo proyecto. Y para conseguir financiarlo, acudir a una plataforma de crowdfunding puede convertirse en una idea estupenda. ¿Pero cómo sacar el máximo partido a estas plataformas? ¿Cómo podemos conseguir que nuestro proyecto gana en visibilidad y a la vez, somos capaces de cumplir con lo que prometemos de forma realista?
Marta Antúnez, directora general de la conocida plataforma de crowdfunding ULULE España, desgrana algunas de las principales claves que hay que tener en cuenta.
Un proyecto atractivo
Ya sea un gadget tecnológico innovador, una iniciativa solidaria o un producto cultural (un libro, disco, documental…), el proyecto debe ser interesante y, sobre todo, aportar valor.
Es muy importante que esté bien explicado y contenga toda la información y que el texto y las imágenes logren captar la atención de los usuarios y les animen a contribuir en la campaña y compartirla.
Un objetivo de financiación realista
Es fácil caer en los “por si acaso” a la hora de calcular la financiación necesaria para desarrollar una idea. Cuando en una campaña fijamos el objetivo de financiación, a menudo, tendemos a sumar partidas ideales que en una primera fase quizá no son tan necesarias.
Es conveniente reducir las aspiraciones a lo realmente imprescindible y dividir el proyecto en fases para que sea más sencillo convertirlo en realidad.
El objetivo de financiación debe ser el mínimo necesario para poner en marcha el proyecto, sin olvidar que este objetivo siempre se puede superar y lograr recaudar el 120% o el 200% o más del objetivo inicial.
Recompensas atractivas y para todos los bolsillos
La unión hace la fuerza y cada contribución cuenta, hasta la más pequeña. No todos los amigos, familiares, conocidos y fans pueden colaborar con grandes importes en las campañas; por ello, creando recompensas escalonadas para aportaciones de 5, 10, 20, 50, 100, 500 €… permitimos que el importe no se convierta en una barrera a la hora de recaudar fondos.
Es interesante ofrecer no solo recompensas materiales, sino experiencias exclusivas (fiestas VIP, videoconferencia con los creadores, atrezzo de la película…) y también paquetes destinados a empresas o asociaciones, como formaciones personalizadas o material de oficina, y no solo para mecenas individuales.
Contar con una comunidad previa
Una vez que tenemos una buena idea de producto o servicio, el objetivo de financiación claro y recompensas atractivas, las primeras personas interesadas en apoyar nuestro proyecto serán aquellas que ya nos conocen.
Sus contribuciones serán las que atraigan la participación de mecenas externos que han llegado hasta nuestra campaña mediante el boca-oreja.
Sin esta base, es muy complicado lograr cerrar con éxito una campaña de crowdfunding. Por ello, antes de lanzar la campaña, hay que trabajar las redes sociales, crear lazos con medios especializados y locales y hacer networking con personas y corporaciones que puedan ser clave en el futuro, para atraer todo el tráfico posible a nuestra web, visitas al blog y conseguir la máxima difusión.
Comunicar, comunicar, comunicar
Nada de lo dicho hasta ahora tiene sentido si una vez que la campaña de crowdfunding está on-line, no se comunica correctamente.
Para evitar abandonar el proyecto durante el proceso de recaudación, resulta muy útil elaborar previamente un plan de comunicación básico que establezca: qué vamos a comunicar, dónde lo vamos a comunicar y a quiénes se lo vamos a comunicar.
“El qué” puede ser información complementaria sobre el proyecto, como mostrar el proceso de fabricación del producto, o explicar más detalles sobre la idea, los hitos que van ocurriendo según avanza la campaña, así como llamadas a la acción, eventos, sorteos especiales y otros motivos que se nos ocurran.
“El dónde” será en nuestros perfiles de redes sociales, notas de prensa que enviemos a los medios y blogs que previamente hayamos contactado, anuncios de pago online, newsletters, carteles, firma del e-mail, acciones de marketing de guerrilla… todos los canales que tengan sentido para nuestra clase de proyecto. “El quiénes” serán aquellas personas que hemos definido como público objetivo teniendo claro su sexo, edad, ubicación, aficiones…
Si seguimos estos consejos para gestionar las 5 claves del crowdfunding, nuestra campaña tendrá muchas más posibilidades de financiarse con éxito.