Ikea también compra startups. Lo ha hecho en el pasado y acaba de volver a confirmar su lado más «emprendedor» al anunciar hace unas horas la adquisición de TaskRabbit, una de las plataformas de economía colaborativa más importante de Estados Unidos y que, tras la adquisición, podría expandirse rápidamente a nuevos mercados.
Taskrabbit se presenta desde 2008 como una plataforma en la que cualquier profesional puede anunciar sus servicios, que van desde ayudar a la hora de hacer una mudanza, a realizar pequeñas reformas a domicilio o echar una mano en el mantenimiento de parcelas y jardines.
¿De dónde nace entonces el interés de Ikea por esta startup? Porque probablemente la categoría más popular de este market place de «manitas a domicilio» corresponde a la de montaje de muebles e instalación de dispositivos electrónicos. Es decir, incluso antes de ser comprados por Ikea, muchos de los usuarios de TaskRabbit ofrecían su ayuda a la hora de transportar y montar los muebles fabricados por la multinacional sueca.
El gigante de los muebles quiere plantar cara así a empresas como Amazon, que en Estados Unidos ya está ofreciendo un servicio de montaje de muebles para determinados productos y de paso, conseguir un porcentaje de esa actividad informal que ya se estaba produciendo por otros cauces.
De momento los planes de Ikea pasan por integrar Taskrabbit dentro de su modelo de negocio, afianzándolo en primer lugar en Estados Unidos, para después trasladarlo a nuevos mercados. Hasta esta fecha, Taskrabbit ha conseguido levantar 37 millones de euros en distintas rondas de financiación por lo que aunque no han transcendido los detalles sobre el precio de compra, los analistas especulan que debería situarse entre los 50 y 80 millones de dólares.
