Érase una vez un colombiano, un español y un italiano que se conocen trabajando de consultores en McKinsey y… voilà! Así podría empezar el cuento sobre Hogaru, una startup que llega para ofrecer servicios de limpieza caracterizados por “la flexibilidad en la programación y el cumplimiento en el servicio”, dirigidos tanto a empresas como a particulares. Esta iniciativa se ha hecho mayor tras su paso por la incubadora de negocios Y Combinator, de donde emergieron grandes como Airbnb, Instacart o Stripe y actualmente forma parte del universo Silicon Valley.
La propuesta de limpieza bajo demanda de Hogaru funciona actualmente en Colombia, concretamente en Bogotá, Calí y Medellín, pero ya aspiran a internacionalizarse y llegar a otros países, incluyendo España. Cuentan con un equipo formado por más de 500 personas, la mayoría de ellas mujeres, y sus impulsores destacan que basan parte de su éxito en esa plantilla, a la que se les ofrece sanidad, seguridad social y con la que se tiene un trato más cercano. De ello han hablado en el suplemento Retina del diario El País, donde explican que para ellos es fundamental contratar a la gente, fidelizar a los trabajadores porque estos atraerán “a personas de su confianza”.
El año 2018 promete ser apasionante para esta joven startup. Quieren salir a la conquista de nuevos mercados y para ello han conseguido capital suficiente para emprender ese reto. Este procede de una ronda de financiación levantada con la apuesta inversora de The Venture City y varios business angels. También Y Combinator ha confiado en el proyecto y ha entrado en el accionariado de la empresa –con un 7% de la propiedad.
Hogaru ha realizado ya más de 342.000 limpiezas y cuenta con un equipo de más de 550 profesionales del aseo contratada “con afiliaciones”, como destacan en su página web www.hogaru.com.
