Durante el evento Surface de la semana pasada el hardware fue el gran protagonista. Equipos como el Surface Duo y el Surface Neo generaron una gran expectación gracias a su acabado con doble pantalla, pero en segundo plano había otra estrella que no pasó desapercibida, Windows 10X.
Este sistema operativo es una versión recortada y personalizada de Windows 10 que está adaptada para aprovechar al máximo las posibilidades que ofrecen los equipos y dispositivos con doble pantalla y es, por tanto, el director de orquesta que utiliza Surface Neo.
No hay duda de que, en líneas generales, Surface Neo tiene la esencia de un dos en uno combinada con la «magia» de esa doble pantalla y la versatilidad que representa la posibilidad de utilizarlo casi como un portátil. Sin embargo, un equipo de este tipo implica algo más que pegar dos pantallas y adjuntar un teclado, y es ahí donde el software, Windows 10X, entra en juego.
Este sistema operativo, conocido también como Windows Lite y Windows Core OS, está optimizado para ofrecer un óptimo aprovechamiento de todos los elementos que forman un dispositivo como el Surface Neo. No solo es capaz de adaptar cada pantalla a las transiciones necesarias en función de los movimientos del usuario, sino que además puede ejecutar aplicaciones Win32 en contenedores para controlar mejor el consumo de la batería.
Una novedad muy importante, ya que al dar forma a un dispositivo con doble pantalla se produce un aumento notable del consumo de batería. Alimentar dos pantallas es un desafío importante a la hora de conseguir una buena autonomía en un dispositivo portátil, y Surface Neo no será una excepción.
Como no podía ser de otra forma Microsoft sentará las bases de una nueva oleada de dispositivos doble pantalla con el Surface Neo. Se espera un panorama similar al que vimos cuando se produjo el anuncio del primer Surface, un convertible que sirvió de inspiración a los grandes OEMs para lanzar versiones personalizadas.
Entre los grandes que lanzarán equipos portátiles con doble pantalla se encuentran nombres como ASUS, Dell, HP y Lenovo, y sí, todos ellos utilizarán Windows 10X. Las primeras unidades deberían empezar a hacer acto de presencia en algún momento de 2020.
