No hay duda, un portátil profesional es una herramienta de trabajo que debemos cuidar y mantener siempre en buen estado, ya que de ello dependerá la experiencia de uso que disfrutaremos, la productividad y el ciclo de vida útil que éste será capaz de ofrecer.
El rendimiento y las posibilidades de un portátil profesional vienen definidas por sus especificaciones de software y de hardware, por eso hay un mínimo que siempre debemos buscar, pero su correcto aprovechamiento dependerá del uso y de los cuidados que le demos.
Por ello una persona que conozca la forma más eficiente de configurar, utilizar y mantener un portátil será capaz de sacarle un mayor partido que aquella que se limita a realizar un uso estándar y despreocupado del mismo, de hecho esta última acabará teniendo problemas tarde o temprano.
Saber utilizar y cuidar un portátil es muy importante y por ello en este artículo vamos a compartir con vosotros cinco consejos que os ayudarán a sacar el máximo partido y que resultan muy fáciles de aplicar.
1.-Portátil y multitarea eficiente
Tener varias aplicaciones abiertas de forma simultánea puede ayudarte a ser más productivo pero debes tener en cuenta que esto afectará al consumo de batería y al rendimiento del equipo, así que debes evitar tener demasiadas cosas en segundo plano si no vas a ser capaz de aprovecharlas realmente.
Esto aplica también a las pestañas del navegador y a las soluciones de seguridad que tengamos activadas. Hacer un uso eficiente la multitarea en un portátil profesional nos ayudará a disfrutar de una mayor autonomía y de un rendimiento más equilibrado.
Si quieres saber cómo puedes cerrar aplicaciones abiertas en segundo plano y liberar recursos echa un vistazo a este artículo.
2.-Prepara todo lo que necesitas, y no lo descuides
Mantener el sistema operativo actualizado es sólo una parte fundamental para conseguir un aprovechamiento óptimo del mismo, también debes tener preparado todo el ecosistema de aplicaciones y herramientas que vas a utilizar, y esto implica que deben estar actualizadas.
Si no cumplimos este punto es posible que parte de esas aplicaciones empiecen a darnos problemas o que tengan que actualizarse en el momento menos apropiado, lo que puede acabar siendo una molestia y un retraso.
Con un uso frecuente las aplicaciones suelen mantenerse actualizadas, ya que el proceso es automático en la mayoría de los casos. En aquellos casos en los que dicho proceso no sea automático busca actualizaciones con cierta frecuencia y no las retrases demasiado.
3.-Aprovecha los diferentes planes de energía Windows 10
El plan de energía afecta en gran medida a la experiencia de uso que tendremos con un portátil, así que debemos utilizarlo correctamente y adaptarlo a cada situación en concreto.
En este artículo encontraréis toda la información que necesitáis para crear un plan de energía personalizado en Windows 10, y justo debajo de estas líneas os dejamos un resumen con las claves de cada plan predefinido.
- Modo de alto rendimiento: ideal para cuando utilizamos el equipo conectado a la corriente o necesitamos sacar adelante trabajos muy pesados.
- Modo equilibrado: es el más recomendable para usar por regla general, ya que busca el equilibrio entre autonomía y rendimiento.
- Modo de bajo consumo: la mejor opción cuando nos queda poca batería o vamos a tener que enfrentar una larga jornada.
4.-Mantén tu portátil en buen estado
Esto implica tanto un cuidado interno como un cuidado externo. El primero pasa por mantener el equipo actualizado, libre de programas y aplicaciones que no usamos y realizar copias y análisis de seguridad de forma periódica.
Si cumplimos estos pasos nuestro portátil siempre estará listo para ofrecer una buena experiencia de uso, y tendremos un respaldo que nos permitirá recuperar nuestros datos y archivos si sufrimos un incidente de seguridad.
El segundo supone mantener el equipo limpio para evitar que se produzcan acumulaciones de suciedad y polvo que puedan llegar a afectar al rendimiento del mismo. Para ello es recomendable limpiarlo a fondo al menos una vez cada mes.
5.-Utiliza la suspensión y la hibernación
Son dos herramientas que pueden sernos de gran ayuda para esos momentos en los que debemos hacer pausas por un tiempo determinado, aunque no todo el mundo tiene claro cuándo debe elegir una u otra.
Bajo el modo suspensión de Windows 10 el portátil entra en un estado de bajo consumo de energía pero mantiene el trabajo en el punto en el que lo dejamos. Al volver todo se inicia más rápido y podremos seguir adelante sin esperas. Es recomendable para cuando vayamos a hacer pausas cortas.
El modo hibernación reduce al mínimo el consumo de energía y también permite volver a nuestro trabajo en el punto en el que lo dejamos, pero crea archivos temporales en la unidad de almacenamiento y la recuperación es más lenta. Es recomendable para cuando vayamos a hacer pausas largas.
