Los portátiles de bajo coste se han convertido en una alternativa cada vez más interesante, gracias a la mejora de rendimiento que han ido experimentado los procesadores económicos, y de bajo consumo, que integran este tipo de equipos. En este sentido, los nuevos procesadores Jasper Lake de Intel y la serie Athlon de AMD son dos claros ejemplos de lo dicho.
Bajo la serie Jasper Lake se agrupan procesadores como los Intel Pentium y los Intel Celeron, están fabricados en el proceso de 10 nm del gigante del chip, y vienen configurados con hasta cuatro núcleos. Los Athlon de AMD, y otras versiones de bajo coste como la APU AMD 3020E, utilizan las arquitecturas Zen y Zen+, y cuentan con configuraciones de dos núcleos y dos hilos, y de cuatro núcleos y cuatro hilos, según el modelo.
Este tipo de procesadores son capaces de ofrecer un buen rendimiento con Windows 10 y con la mayoría de tareas básicas que realizamos a diario, incluyendo ofimática, navegación web y reproducción de contenidos multimedia. Normalmente vienen acompañados de 4 GB de RAM y de entre 64 GB y 128 GB de capacidad de almacenamiento en los portátiles de bajo coste más económicos.
Un equipo con esa configuración puede tener un precio aproximado de 250 euros. La calidad de materiales de los portátiles de bajo coste, y la calidad de la pantalla, es bastante modesta y totalmente acorde al precio. Suelen estar fabricados en plástico, y montan paneles TN con resolución 768p, lo que significa que están por debajo del nivel FullHD, y que los ángulos de visión que ofrecen no son nada buenos.
Sin embargo, si ponemos en relación las prestaciones que ofrecen con su precio de venta, la conclusión a la que podemos llegar es muy simple: los portátiles de bajo coste pueden ser una buena opción para cubrir unas necesidades de uso sencillas, centradas en ofimática básica, multitarea, navegación web y contenidos multimedia, haciendo además una inversión mínima.
En caso de que estés valorando hacer una renovación de varios equipos obsoletos en pyme, pero tengas un presupuesto muy limitado, los portátiles de bajo coste pueden ser una buena opción si van a estar destinados a esos usos que te hemos comentado.
