Según revela el estudio «La formación y empleo de los jóvenes españoles. Trayectoria reciente y escenario futuros», elaborado por la Fundación BBVA y dos profesores del Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (Ivie), Lorenzo Serrano y Ángel Soler, casi el 60% de las oportunidades de empleo que se generen hasta 2025 estarán destinadas para personas con educación universitaria o formación profesional superior.
El mercado laboral dejará fuera por tanto a los jóvenes menos cualificados y preocupa especialmente la situación de los jóvenes bautizados como «ninis», que podrían estar en riesgo de ser excluidos del mercado laboral y quedarse en un tipo de trampa permanente. Para afrontar estos escollos y que se aprovechen todas las oportunidades laborales, los investigadores proponen mejorar el funcionamiento de la enseñanza desde los niveles más básicos con el fin de reducir el fracaso escolar.
Y es que, los jóvenes españoles muestran pobres resultados, incluso entre los que cuentan con estudios superiores escasea un nivel competencial más alto ya que sólo alcanza un 5% frente al 14,7% de promedio de la OCDE. El nivel de competencias es tan determinante, según los investigadores, que una parte importante de la sobrecualificación se ve matizada por este factor.
Uno de cada dos universitarios que está en ocupaciones que no requieren formación superior tiene un nivel bajo o medio-bajo de competencias. Existen problemas en cuanto al nivel de competencias, pero también en la formación por la polarizacion entre niveles educativos altos y bajos y «demasiado» abandono educativo temprano.
Los experto, también abogan por reforzar las políticas activas de empleo y centrarlas menos en los subsidios y más en la formación el asesoramiento personal al parado, además de desarrollar iniciativas públicas y privadas mas potentes que las actuales para mejorar el empleo en los jóvenes escasamente cualificados ya que sin ellas sus riesgos de exclusión laboral «son elevados».