El secretario general de UGT, Cándido Méndez, abandonará su cargo el próximo mes de marzo después de 22 años al frente. Méndez ha señalado que tras su marcha de la Secretaría General seguirá vinculado a UGT, pero no para desarrollar tareas dentro del sindicato. «Después de 22 años de sobreexposición pública, quiero recuperar mi vida privada», ha subrayado. Méndez dirá adiós al cargo en el 42 Congreso Confederal de UGT, que se celebrará entre el 9 y el 12 de marzo en Madrid, con la participación de 601 delegados y bajo el lema «La Unión en pie».
Para Méndez, este Congreso supondrá el cierre de una etapa y la apertura de otra, pero no sólo por el cambio en la Secretaría General. En su opinión, tiene «mucha más entidad» el cambio organizativo que ha diseñado el sindicato y que culminará en la configuración de tres nuevas y únicas federaciones, muy sectorializadas, y que exigirán a su vez una reordenación de las competencias dentro de la organización.
El que pilotará esta nueva UGT no será Méndez, sino uno de los tres candidatos que han manifestado su intención de sucederle: Josep María Álvarez (UGT-Cataluña); Miguel Ángel Cilleros (Federación de Servicios Ciudadanos), y Gustavo Santana (UGT- Canarias). Méndez no ha querido mostrar un apoyo público y explícito a ninguno de ellos y se ha limitado a señalar que para asumir cualquier cargo en la organización hace falta «capacidad y experiencia».
Méndez nació en Badajoz en enero de 1952, pero cuando sólo tenía 4 años se mudó con su familia a Jaén. En 1970, con 18 años comenzó a estudiar ingeniero técnico industrial especializado en química metalúrgica y se hizo militante del PSOE y también de UGT. Tras estudiar la carrera y hacer la mili (octubre del 73 – diciembre del 74), en 1978 con 26 años, Méndez se convirtió en secretario de Acción Reivindicativa de la Comisión Ejecutiva Provincial.
Aquí arranca la fulgurante carrera sindical de Cándido Méndez. De la secretaría de Acción Reivindicativa, pasó a la secretaría General de UGT- Jaen en 1980. Aquel año se convirtió en diputado por el PSOE. Mantuvo el acta de diputado hasta 1986, año en el que pasó al Parlamento Andaluz, también ocupando un escaño. En aquel mismo año 1986, Cándido Méndez Rodríguez era elegido secretario general de UGT en Andalucía, renunciando en 1987 a su acta como diputado socialista en el Parlamento de Andalucía.
De la secretaría general del sindicato en Andalucía, en 1994 daba el salto a la secretaría general de UGT sustituyendo a Nicolás Redondo Urbieta durante el 36 Congreso Confederal. En 1997 fue nombrado vicepresidente de la Confederación Europea de Sindicatos, confederación de la que fue presidente entre 2003 y 2007. Además, en el año 2004 recibió la Medalla de Oro de Andalucía y desde junio de 2008 es miembro de la Real Academia de Ciencias Sociales y del Medio Ambiente de Andalucía.
A diferencia de Toxo, Cándido Méndez ligó su vida profesional a UGT y al PSOE, ocupando diferentes cargos de responsabilidad desde los 26 años. 31 años como sindicalista, defendiendo los derechos de los trabajadores y predicando la lucha de clases. Aunque todo apunta a que la clase trabajadora no la ocupó, al menos no durante mucho tiempo. Cosa que, en cambio, sí que hizo su compañero tras las pancartas en las movilizaciones sindicales. Fernández Toxo trabajó en la Empresa Nacional Bazán de Construcciones Navales Militares, donde continuó su vida laboral hasta su prejubilación dentro de un ERE iniciado por la SEPI en abril de 2005.
