Exaprint, empresa especializada en la personalización e impresión de productos de comunicación, ha lanzado ExaMask, una mascarilla diseñada a partir del recurso de su taller, el papel. La mascarilla ha sido creada en España y destaca por su diseño eco-responsable, ya que está confeccionada en papel certificado PEFC y proporciona una primera barrera a las proyecciones de aire (estornudos, tos…) y limita el contacto entre las manos y la
cara.
La facilidad de montaje y de almacenamiento de ExaMask, gracias a su diseño plano, hacen de esta innovación una solución de protección de primer nivel, sencilla de utilizar y con un bajo impacto económico y ambiental.
Además, la mascarilla se adapta perfectamente a las diferentes morfologías gracias a un sistema de muescas y pliegues protegiendo la zona de
la nariz y la boca durante media día, ya que como la mayoría de las mascarillas, su vida útil es de cuatro horas. Disponible en blanco o personalizable, la mascarilla es apta tanto para adultos como para niños.
Una donación de 50.000 ejemplares
Exaprint quiere ser actor y ejemplo en la crisis de Covid-19. Por ello, la empresa se prepara para ofrecer hasta 50.000 ejemplares a las instituciones que lo soliciten: ayuntamientos u otras instituciones públicas, supermercados, industria o empresas de transporte urbano.
“La mascarilla ExaMask no está destinada a un uso profesional o médico”, insiste Tino Herrero, director de la fábrica Exaprint Factoy Iberia. “Sin embargo, se trata de una solución innovadora que ofrece una protección básica en nuestra vida cotidiana. Hemos pensado responsablemente desde su concepción hasta su destrucción, ya que está hecha de papel y puede ser reciclada, lo que no es el caso de las mascarillas tradicionales que empiezan a ensuciar nuestras calles.”