Una nueva información lanzada por Bloomberg asegura que Apple está trabajando en una plataforma de desarrollo que permitirá lanzar aplicaciones universales en 2021. Dicha plataforma se conoce de momento como «proyecto Marzipan», y podría ser uno de los grandes protagonistas de la WWDC de 2019.
Fue en 2017 cuando empezaron a sonar con fuerza rumores que apuntaban al desarrollo de aplicaciones universales para potenciar el ecosistema de software de Apple. La idea era simple, dichas aplicaciones funcionarían sin problemas tanto en iOS como en macOS, aunque había dudas sobre la manera en que el gigante de Cupertino podría ejecutar ese concepto.
Se llegó a barajar la posibilidad de que Apple unificara sus dos grandes sistemas operativos, iOS y macOS, para dar forma a un único sistema operativo global, pero la propia compañía salió al paso para desmentir esos rumores. La idea tenía cierto sentido, pero es cierto que unir ambos sistemas acabaría difuminando las diferencias a nivel de productividad existentes entre sus equipos Mac y sus iPad, por poner un ejemplo sencillo.
Pues bien, con «proyecto Mazipan» se reforzaría la apuesta de Apple por las aplicaciones universales. Dichas aplicaciones tendrán que llegar de forma separada a la App Store y a la Mac Store, y serán sometidas a un proceso de validación independiente, pero los desarrolladores no tendrán que escribirlas dos veces.
Una decisión acertada, sin duda, ya que permitirá ampliar las aplicaciones disponibles para macOS y iOS de una manera sencilla y rápida, y brindará a los desarrolladores una oportunidad única para maximizar la monetización de sus aplicaciones, al poder distribuirlas en ambos sistemas operativos.
Se espera que la primera versión del kit de desarrollo que permitirá portar aplicaciones de iOS a macOS sea anunciada en la WWDC de 2019. Antes de terminar un apunte importante. La apuesta de Apple por las aplicaciones universales ha reforzado los rumores que indicaban que la compañía de la manzana podría utilizar sus propios SoCs Apple AX en sus Mac.
Todavía no hay nada claro, pero la verdad es que aunque resulte completo tiene mucho sentido. Llevar a cabo una transición que culmine en la utilización de SoCs Apple AX en toda la línea de productos Apple permitiría conseguir una universalización absoluta y dejar, además, un mayor número de ingresos en casa al prescindir de Intel como proveedor de procesadores.
