La digitalización tiene mucho que ver con la creciente presencia de puntos estratégicos en el mapa, donde se llevan a cabo conexiones de Internet. Estos puntos concentran núcleos de servicios empresariales sofisticados, importantes para el desarrollo económico y empresarial, haciendo de esa zona un lugar más atractivo para las empresas, personas y proveedores de infraestructuras digitales.
Así lo relata el reciente estudio publicado por DE-CIX, «The birth of an international Internet hub: a playbook for developing a digital society» donde una de las conclusiones principales que se extraen es que estas localizaciones resultan fundamentales para el crecimiento e inversión de la región donde se sitúan. Es decir, estos hubs influyen directamente en el desarrollo económico de las regiones geográficas más grandes del mundo.
Para entender mejor por qué es importante y cuáles son los grandes beneficios de convertirse en hub internacional, el estudio de DE-CIX repasa la trayectoria de los Emiratos Árabes Unidos para poder comprender el éxito que ha experimentado en el desarrollo de esta materia.
En 2012, las costas de los EAU albergaban ya trece cables submarinos, cuatro de ellos regionales y nueve que llegaban a otros continentes. Diez años después, el número de cables submarinos ya alcanza los 17, 11 de los cuales son intercontinentales y, además, otros cuatro que se encuentran en proceso de desarrollo para los próximos años. Otro aspecto importante donde también se aprecia el crecimiento de esta digitalización es, por ejemplo, en el aumento de centros de datos. Hace diez años, solo existían cinco centros de datos en Dubái, mientras que actualmente la cifra alcanza los 17. Es decir, se ha experimentado un crecimiento del 340%. Los EAU ocupan ahora el primer puesto en el CCG en cuanto a suscripciones a líneas fijas y móviles de banda ancha, y el país disfruta de una penetración de Internet de casi el 100%.
Pero no se trata solo de la velocidad, el coste y la ubicuidad de Internet, sino de los efectos derivados de estas mejoras y de la estrategia de digitalización del país. El número de organizaciones internacionales que han establecido su sede mundial en los EAU ha crecido más de un 700 % desde 2012, el número de universidades internacionales se ha duplicado y el número de estudiantes de enseñanza superior ha pasado de 140.000 a un millón en tan solo 10 años. Esto demuestra claramente el poder de la inversión en infraestructura digital, combinada con un entorno normativo con visión de futuro y una sólida estrategia de digitalización.
Pero, ¿qué necesita una ciudad o región para convertirse en hub internacional?
Hay que tener en cuenta que para construir un hub es necesario garantizar el aporte de energía, la presencia de altos estándares de redes de transporte multimodal y el despliegue de sistemas de comunicación relacionados con Internet. DE-CIX ha identificado los cinco pilares sobre los que se sostiene la creación de un hub internacional de Internet:
- Infraestructura de Internet: lo imprescindible. Para construir un hub de Internet, lo primero que hay que hacer es fomentar un gran número de puntos de conexión, ya sean submarinos, terrestres o ambos, lo que supone un aumento del tráfico de Internet y también del número de direcciones IP.
- Empresas y organizaciones: zonas de producción. Dar respuesta como centro de instalaciones de producción industrial y ser sede de organizaciones internacionales es esencial para conformar un importante centro financiero. Además, contar con un núcleo importante de líneas de transporte y tráfico aporta la visibilidad necesaria para ser reconocidos internacionalmente.
- Gente y comunidad: profesionales altamente cualificados. Hace falta mano de obra local altamente cualificada para atraer y fomentar el desarrollo de iniciativas relacionadas con las TI. Un sistema educativo correctamente establecido garantiza la creación y retención de talento. Al mismo tiempo que alojar y celebrar conferencias y eventos nacionales e internacionales de gran relevancia permiten también la oportunidad de llevar a cabo un intercambio de conocimientos y experiencias muy enriquecedor.
- Entorno normativo: un sistema estable. Otro factor que no se debe dejar atrás es encontrarse en un entorno normativo estable y propicio que atraiga a las empresas internacionales; en términos de leyes, impuestos, licencias, capacidad para hacer negocios allí.
- Capital: fácil acceso. El acceso a la comunidad de inversores para la financiación de capital y deuda debe ser fácil y abordable. Esto significa que la entrada permanente de inversiones en la infraestructura digital permitirán un desarrollo altamente interconectado y escalable del sector TMT (tecnología, medios y telecomunicaciones) local.
En otras palabras, para tener éxito en la construcción de un hub internacional, es necesario asegurar un entorno regulatorio estable, disponer de opciones de inversión y una hoja de ruta precisa para hacerlo realidad. Sin olvidar que para que se desarrolle un cierto nivel de digitalización, estos requisitos deben combinarse, en paralelo, junto con el talento, la comunidad y la diversidad.
