Desde mayo de 2019 es obligatorio registrar la jornada laboral pero, la llegada de la pandemia y sus consiguientes medidas de higiene provocaron el desarrollo de nuevas medidas de marcaje en las empresas. En este contexto, Grupo SPEC, ha desarrollado un nuevo sistema de marcaje con huella que, por primera vez, hace compatible este tipo de marcaje biométrico con el Reglamento Europeo de Protección de Datos (RGPD). De esta forma, el trabajador conoce en todo momento dónde se encuentra la información de sus datos biométricos, que no se guardan ni se envían a ningún dispositivo externo o base de datos, sino en una tarjeta de proximidad que siempre está en su poder.
De esta manera, la nueva tarjeta y sistema de marcaje, Mifare Desfire combina la identificación mediante tarjeta y huella para validar el marcaje. Desde SPEC se garantiza la seguridad de los datos biométricos, lo que ayuda a cumplir con el RGPD. La principal diferencia con los sistemas de marcaje actual radica en que, incluso durante el proceso de grabación de la huella en la tarjeta (enroll), éste se realiza desde el propio terminal idSense asociado a la tarjeta, no en el software de control horario. ¿Resultado? La información queda registrada sólo en la tarjeta.
”Recibimos muchas inquietudes por parte de nuestros clientes respecto a los datos biométricos, como, por ejemplo, dónde se guardan o cómo se transportan en el proceso de enroll y marcaje. Depende de la interpretación que hiciese cada uno sobre el RGPD, podías pensar que cumplías o no con la normativa. Así que decidimos evolucionar el sistema de huella en tarjeta para que tuviéramos la certeza de que el propietario de los datos biométricos es el único que custodia sus datos”, explica Carlos Mochón, CTO de Grupo SPEC.
Verificación huella en tarjeta
Este nuevo sistema de marcaje contrasta la información de la tarjeta con la huella del usuario antes de validar el marcaje. El proceso es muy sencillo. Primero, se acerca la tarjeta de proximidad al terminal y seguidamente se coloca el dedo en el sensor de huella. El propio terminal realizará la verificación y si es correcto procederá a enviar el registro al software. En ningún caso, se mantiene la permanencia de datos.
Si bien los datos biométricos son considerados una información de carácter sensible, desde la Agencia Española de Protección de Datos Personales se expone que “únicamente se considerará categoría especial de datos en los supuestos en que se sometan a tratamiento técnico dirigido a la identificación biométrica y no en el caso de verificación biométrica”. La tarjeta Mifare Desfire compara los datos que hay en la tarjeta que pasa el empleado por el terminal, con la huella que ficha seguidamente. Si estos dos datos coinciden, el marcaje será válido.
