Google no entregó a las autoridades de protección de datos Alemana los datos recogidos de las redes WiFi dentro del plazo acordado. Si recordáis, el gigante de Internet admitió hace menos de un mes que desde 2007 había estado interceptado y almacenado correos electrónicos y otras informaciones personales sin permiso (con los vehículos de su servicio Street View) en redes WiFi no protegidas.
Parece que su CEO Eric Schmidt finalmente va a optar por la transparencia y entregará los datos en cuestión a las autoridades de Alemania, Francia y España durante los próximos dos días, además también publicará los resultados de una auditoría externa que examinará las prácticas de los coches de Street View.
«Ser honesto sobre tus propios errores es lo mejor para que no vuelvan a suceder», aseguraba Schmidt. Con esta iniciativa, la compañía espera volver a recuperar la confianza de sus usuarios, aunque el CEO, quitándole hierro al asunto afirmaba la siguiente incongruencia: «los datos están más seguros en los servidores de Google que en los discos duros de los usuarios».