La Eurocámara ha pedido esta semana sanciones más contundentes contra las empresas que no respeten la igualdad salarial entre hombres y mujeres. Los parlamentarios reclaman a la Comisión que estudie medidas como las multas administrativas o la exclusión de subvenciones en la próxima revisión de la normativa de la UE sobre igualdad en el trabajo.
A pesar de los esfuerzos que se están haciendo desde distintas organizaciones europeas y nacionales, la brecha salarial en la UE se situó en 2010 en el 16,4% (16,7% en el caso de España) y disminuye a un ritmo muy lento, según destaca el Parlamento.
Por ello, los diputados piden también auditorías periódicas obligatorias dentro de las empresas, más poder para los organismos de fomento y control de la igualdad, clasificaciones profesionales no sexistas y un certificado europeo de calidad para empresas y administraciones.
Tras la resolución de la eurocámara, la Comisión tiene de plazo hasta el 15 de febrero de 2013 para revisar esta legislación, vigente desde 2006. El informe, hace hincapié en que «a pesar de la legislación vigente, las inspecciones y medidas punitivas son a menudo totalmente inadecuadas por lo que al principio de igualdad de retribución se refiere».
Los países de la UE ya están obligados a ofrecer una indemnización o reparación a las víctimas de la desigualdad salarial, así como a establecer sanciones, aunque la norma actual deja a discreción de los países la elección de las penas. Los diputados subrayan que, en muchos casos, los Estados miembros no han impuesto sanciones a los empresarios.
Además, la Eurocámara propone la introducción en los contratos públicos de una cláusula que imponga el «respeto de la igualdad de género y de retribución para un mismo trabajo». Por otro lado, el informe señala la necesidad de introducir cuanto antes en las directrices para el empleo un objetivo concreto para reducir la brecha salarial.