El fabricante de tarjetas de memoria SanDisk ha presentado hoy lo que califican «el lanzamiento del año»: su nueva gama de tarjetas Extreme Pro que, con una capacidad de transferencia de 90 Mb por segundo se convierten en las más rápidas del mercado.
La nueva gama de tarjetas está destinada a usuarios profesionales que necesitan exprimir al máximo no ya las cámaras réflex digitales que están ahora en el mercado, sino las que aparecerán en los próximos meses y que cuentan con tecnología UDMA6.
Christophe Rocca, responsable de marketing de SanDisk para el sur de Europa ha estado hoy en Madrid para presentar Extreme Pro, una gama de tarjetas que en sus propias palabras «están llamadas a revolucionar el trabajo de los fotógrafos profesionales». Para Rocca, Extreme Pro es una tarjeta para «convivir en perfecta armonía con las cámaras digitales más sofisticadas, y su compatibilidad con el protocolo UDMA-6 le proporciona una comunicación más que eficiente con la nueva generación de cámaras que se presentarán en los próximos meses».
Tres son los argumentos principales sobre los que los responsables de SanDisk están convencidos de que su nuevo producto se encuentra algunos escalones por encima de la competencia: su alto rendimiento, su mayor fiabilidad y el diseño simplificado.
Alto rendimiento
La arquitectura de doble canal y los algoritmos de software de SanDisk® Power Core™ Controller duplican su rendimiento, y así la velocidad de lectura/escritura de las tarjetas SanDisk Extreme Pro CompactFlash llega hasta 90MB/s a través de un bus UDMA-6.
Durante la presentación de las nuevas tarjetas, el equipo de MuyPymes asistió a una demostración en la que pudo comprobar que el acceso a los datos después de una ráfaga de diez disparos (almacenando JPEG y RAW) baja de los diez segundos, mientras que utilizando una tarjeta básica, se superaba ampliamente el minuto. Esto no sólo supone un ahorro de tiempo considerable durante la toma de imágenes sino que según sus propias pruebas, el profesional puede ahorrar hasta un 30% del tiempo que emplea en transferir las imágenes al ordenador.
Mayor fiabilidad
Los algoritmos incluidos en el firmware y el motor ECC de 42 bits de SanDisk Power Core Controller mantienen la integridad de los datos y aumentan la resistencia mediante la técnica wear leveling optimizada. Extreme Pro ha sido diseñada para poder trabajar con agilidad en condiciones extremas. En este sentido, su carcasa metálica y su recubrimiento especial en silicona le permiten soportar temperaturas que van desde los -25º bajo cero hasta los 85º soportando además una humedad del 90%
Diseño simplificado
Para aumentar la durabilidad general de la tarjeta, SanDisk Power Core Controller cuenta con un diseño integrado que necesita de menos componentes individuales en la placa de circuito impreso.
Memoria
Extreme Pro ha sido diseñada para que el profesional no se vea en la obligación de tener que cambiar de tarjeta, por lo que su modelo más alto ofrece nada menos que 64 Gigas. Además, la marca comercializa modelos de 16 y 32 Gigas respectivamente.
Tal y como reconoce el propio Rocca, «su gran capacidad de almacenamiento y su velocidad, la hacen muy atractiva para un reducido mercado de usuarios muy profesionales. No es una tarjeta para todos los públicos».
Sin embargo, y aunque en San Disk son conscientes de que la comecialización de esta tarjeta no va a traducirse en un «gran volumen de ventas» aseguran que es, sin lugar a dudas «el mejor aliado del profesional, y es que hay que ser consciente de que muchos de los malos resultados que obtenemos con una cámara son directamente achacables a la mala calidad de la tarjeta que introducimos en ella».