Más de 30% de las pymes españolas solicitan a su canal de distribución que les proporcione e instale software ilegal en sus equipos informáticos. Así lo ha anunciado la Business Software Alliance (BSA) en la presentación de su «III Estudio de Software ilegal en el canal de venta».
En opinión del presidente del comité español de BSA, Luis Frutos, aunque la venta de software pirata en el canal de distribución se ha reducido casi un 25 por ciento desde 2007, lo cierto es que todavía las empresas no están concienciadas de los riesgos.
Frutos destacó que las pymes españolas son las que, en un 31 por ciento de los casos, «incitan o solicitan al canal de distribución que les de software ilegal». Esto ocurre porque las empresas no son conscientes de las implicaciones legales (un 36 por ciento) ni de los riesgos (un 64 por ciento) de la instalación en sus equipos de copias ilegales de software.
Además, BSA ha alertado de que cuando estas empresas se dirigen a un establecimiento de venta de software, sólo un 1 por ciento no lo ofrece nunca. Del resto, más de un 62 por ciento lo ofrece como primera opción, un 13 por ciento como única opción, y en torno a un 28 por ciento lo ofrece una vez las empresas se interesan en él.
En cuanto a la recomendación que estas empresas reciben de su distribuidor, casi un 91 por ciento de los establecimientos ‘ilegales’ recomienda al consumidor el empleo de software ilegal y, del 9 por ciento restante, cerca de un 8 por ciento lo recomienda, aunque informa de sus riesgos.
Ante este panorama, Frutos señala que «Internet y las pymes son el objetivo a abordar ahora con una serie de medidas dirigidas a al gestor de las pequeñas empresas». Y añade: «el foco a partir de ahora es no perder la situación lograda e intentar ahora concienciar al director de la pyme de que el software ilegal sólo trae perjuicios».