Son dos de los grandes descubrimientos en internet de la era moderna y han revolucionado nuestros hábitos de vida, sin que apenas nos demos cuenta. Estos dos gigantes han ido creciendo y diversificando el producto, estando cada vez más presentes en nuestro día a día. Hasta tal punto que han creado cierta adicción, especialmente entre la población más joven. Hablamos de Google y de Facebook entre otras. Por esta adicción y por los usos no tan positivos que puedan tener estas aplicaciones, un grupo de fundadores y primeros empleados de estas dos compañías quieren repensar el producto. Han creado para ello el Centro para Humanizar la Tecnología.
El objetivo es lanzar la voz de alarma sobre ciertas costumbres adquiridas en los últimos años. Esto es lo que afirma su manifiesto fundacional. «Lo que percibimos como una adicción es parte de algo mucho más grande. Es parte de un problema invisible que afecta a toda la sociedad. Facebook, Twitter, Instagram y Google han creado productos que han tenido un impacto positivo en todo el mundo. Pero estas empresas también han creado un carrera de suma cero por nuestra atención infinita. Lo necesitan para hacer dinero, forzados a rendir más que su competencia, usan técnicas de persuasión para mantenernos pegados. Como los news feeds creados con inteligencia artificial, las notificaciones y más comportamientos para potenciar este uso».
Tim Cook, consejero delegado de Apple, preferiría que su sobrino se mantuviera alejado de las redes sociales. Y es que es especialmente por el uso que dan a estas aplicaciones los menores de edad, por lo que se quieren poner unos límites o bien cambiar la forma de actuar. No son pocas voces las que alertan de la necesidad de poner una edad para empezar a acceder a las redes sociales, y la conveniencia de adoptar ciertas medidas de seguridad, especialmente a la hora de conectar con desconocidos.
Este miércoles tendrá lugar el primer acto público de la plataforma en Washington: “La verdad sobre la tecnología: Cómo consigue tener a los niños enganchados». El proyecto es ambicioso ya que han creado una campaña con una inversión de 7 millones de dólares y aprovecharán la difusión de las televisiones, para generar anuncios en Comcast y DirectTV por un valor de 50 millones de dólares. El objetivo es concienciar a los padres y a los profesores, de los peligros que tiene la tecnología. Asimismo, se alerta de que el uso de las redes sociales de una manera abusiva puede generar depresión.
Redundando en la misma idea, el fundador de Facebook, Mark Zuckerberg, reconocía hace unos días que los más pequeños deberían pasar menos tiempo en la red social y apostaba por un cambio de enfoque. Ahora hay que considerar el tiempo útil que se emplea en Facebook y racionalizarlo.
Y es que muchos psicólogos y educadores han alertado sobre la falta de atención generada, especialmente en la educación secundaria, por el uso de Instagram, Facebook o Twitter. La falta de concentración tiene relación directa en muchas ocasiones con un rendimiento bajo o incluso un abandono de los estudios.
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