Seis de cada diez empresas no actualizarán sus equipos a Windows 7 según destaca un informe sobre situación del mercado realizado por la consultora ScriptLogic Corp.De hecho, el 60% afirma que no tienen de momento planes de llevar a cabo ninguna actualización.
Otros datos indican que el 34 por ciento migraría a finales de 2010 y sólo el 5,4 por ciento desplegaría el nuevo sistema a finales de este mismo año. El coste y la compatibilidad de aplicaciones estarían detrás de estos resultados.
La situación económica actual provoca falta de recursos y ahorro de costes, motivo principal esgrimido por un 35% de administradores de TI para no desplegar en sus empresas el nuevo sistema operativo cliente de Microsoft.
No es sin embargo el principal motivo aludido para no migrar a Windows 7, con un 39 por ciento de compañías resaltando la preocupación por la compatibilidad con las aplicaciones existentes, uno de los caballos de batalla en empresas y principal causante del fracaso de Vista en las mismas.
La falta de tirón inicial ante nuevos sistemas operativos no es nuevo en empresas, que suelen esperar al menos unos meses para ver su comportamiento y estabilidad antes de dar el salto para migrar en ocasiones miles de equipos. Algunos de los encuestados incluso señalan la llegada del primer Service Pack que solvente los errores que se presenten en la edición final, para empezar a pensar en la implantación de Windows 7.