A falta de grandes novedades en lo relativo a hardware los fabricantes siguen refinando el concepto netbook, mejorando aspectos como la pantalla, el teclado o el diseño exterior. En esta línea encontramos la última propuesta de HP.
La compañía presenta un nuevo netbook que, teniendo en cuenta las limitaciones de su clase, se convierte en el aliado perfecto para que los trabajadores naveguen por internet, consulten el correo y revisen sus documentos con una modesta inversión.
En cuanto a la configuración base del ordenador es calcada al resto de netbooks que han pasado por el laboratorio: procesador Intel Atom N270 a 1,6 GHz, un gigabyte de memoria RAM y un disco duro de 160 gigabytes. La tarjeta gráfica es una Intel GMA 950, solvente en tareas no demasiado exigentes con el cálculo de polígonos (videojuegos y aplicaciones 3D).
En general el rendimiento obtenido en las pruebas sintéticas es muy similar a sus competidores y tras unos días de uso diario no aprecian ninguna diferencia sustancial utilizando las aplicaciones habituales. El ordenador cumple en la mayoría de los casos para los que está diseñado y sólo procesos como la codificación de video o el tratamiento de imágenes pesadas dejan entrever sus limitaciones.