El Congreso ha aprobado unanimidad la Ley del contrato de transporte terrestre de mercancías, que según los cálculos del Gobierno beneficiará 120.000 empresas de transporte público, a los que hay que sumar más de 4.000 operadores privados.
Pese a que todos los ponentes celebraron el acuerdo, desde el PP y CiU se lamentó que se «haya dejado al margen» la regulación del transporte de pasajero, aunque se extendió su aplicación al transporte de mercancías por bicicleta.
Según el portavoz «popular» de Fomento, Andrés Ayala, confesó que no es la regulación ambiciosa para el sector que le hubiera gustado impulsar. Por su parte, el diputado socialista Oscar Seco señaló que con esta iniciativa «se consigue un texto duradero y moderno, que dará estabilidad y seguridad al sector porque se asemeja a la normativa de la mayoría de los países de Europa».
La nueva Ley fue impulsada por el Gobierno tras el paro que el sector del transporte realizó en junio de 2008 y actualiza el régimen jurídico del contrato de transporte terrestre de mercancías tanto por carretera como por ferrocarril. Para los socialistas, con esta reforma se cubre la «laguna histórica» que supone que la legislación anterior se remonta al Código de Comercio de 1885 y no estaba «en condiciones» de dar respuesta a las necesidades cambiantes del transporte actual.
