La alpinista Edurne Pasabán aseguró ayer durante la quinta edición del Foro Mujer y Liderazgo, que organizan conjuntamente Banco Sabadell y ESADE Alumni en Barcelona que «liderar equipos humanos en determinados tipos de actividad siendo mujer supone un handicap».
Según ha explicado, liderar «es especialmente difícil y fundamental en expediciones de alta montaña, porque las relaciones que se establecen entre sus componentes son muy estrechas y la convivencia es muy intensa.
Asimismo, Pasabán se ha referido a su carrera para afirmar que cualquier gran proyecto requiere unas elevadas dosis de sacrificio personal y de renuncia, y cuando tuvo que enfrentarse a ello en 2005, decidió seguir adelante. «No sé si esa decisión fue correcta o equivocada, pero es la que tomé y ya está hecho», ha dicho.
Por último, ha señalado que su próximo reto deportivo es subir a pulmón al Everest en la primavera de 2011 y después, retirarse. «Nunca dejaré de ir a la montaña -ha manifestado-, aunque lo más probable es que después de subir al Everest haya llegado el momento de pasar página y dedicarme a cuidar las facetas de mi vida que hasta ahora he tenido más olvidadas».