Las cascada de críticas que viene recibiendo en las últimas semanas ha forzado al presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, a reunir a sus 21 vicepresidentes en un encuentro en el que entre otras cosas se ha querido aprovechar para medir los apoyos con los que cuenta al frente de la patronal.
Como vez son menos, ha accedido a convocar elecciones anticipadas. Su salida de la patronal puede producirse en menos de un mes porque la intención de Díaz Ferrán es proponer los comicios el próximo 20 de octubre.
En el encuentro, según un comunicado de la dirección de la patronal, los vicepresidentes han expresado su «valoración muy positiva» a la gestión de Díaz Ferrán al frente de la CEOE aunque antes de la cita el presidente de la Confederación Empresarial de Madrid (CEIM), Arturo Fernández, dejaba abierta la puerta a ese adelanto electoral.
Fuentes próximas a la CEOE habían precisado que a lo largo del año es «habitual» que se celebren este tipo de reuniones en las que los empresarios no toman ninguna decisión, algo que se limita a los órganos ejecutivos, pero aprovechan para intercambiar opiniones.
En esta ocasión, han analizado en un almuerzo, además de la huelga general, las próximas negociaciones. Sin embargo, como así ha ocurrido, se daba por hecho que, como otras veces, Díaz Ferrán diera a sus vicepresidentes la oportunidad para que hablaran de cualquier tema que les preocupe.
Y cada vez hay más preocupación en si el ex dueño del Grupo Marsans es la persona idónea para seguir ocupando la presidencia de la patronal. Las voces más críticas han coincidido en que las dificultades de las empresas de las que era copropietario Díaz Ferrán debilitan su imagen como representante de los empresarios.