España es responsable de casi el 90% del empleo temporal destruido en toda la Unión Europea durante la crisis, además del 40% del empleo indefinido desaparecido entre el tercer trimestre de 2007 y el mismo trimestre de 2011, según un informe sobre el mercado laboral realizado por Analistas Financieros Internacionales (AFI) y la patronal de grandes empresas de trabajo temporal (Agett).
En concreto, en dicho periodo, la UE-27 ha destruido 1.644.300 empleos temporales, de los que 1.440.000 son españoles. En el caso del empleo indefinido, las economías de los 27 países que conforman la Unión han visto desaparecer 4.294.400 ocupaciones fijas, de las que 1.696.500 (el 39,5%) se concentran en España.
Tras Irlanda, Letonia y Grecia, España es el país europeo que destruye empleo indefinido a un mayor ritmo y, después de Polonia, es el que presenta la mayor tasa de temporalidad, con un 26,1%. Esta cifra supera en un 11,7 puntos la media europea y se encuentra lejos de las tasas de Reino Unido (6%), Bélgica (8,5%), Dinamarca (8,9%) y Austria (10,5%).
La tasa de temporalidad española disminuye a medida que aumenta la edad. Para los jóvenes menores de 25 años, el porcentaje de temporalidad es muy elevado, del 60,8%, lo que supone que seis de cada diez trabajadores menores de 25 años tiene un contrato temporal en España.