Conseguir que nuestra imagen proyecte aquellos valores por los que nos gustaría posicionarnos no es tarea sencilla. Requiere de mucho esfuerzo y de una estrategia de branding personal cuidada. Si has invertido tiempo y, por qué no decirlo, dinero en tener tu propia marca y quieres saber hasta qué punto tiene valor lo que has construido, toma nota de estos cinco indicadores que te dirán que si estás en el buen camino o no.
Son cinco factores que revelan que hemos conseguido ese objetivo de tener una marca personal potente.
- Se puede identificar de manera clara, sencilla y rápida tres cualidades que te diferencian a ti como profesional y/o a tu empresa de productos/ servicios respecto a la competencia. Se puede hacer la prueba preguntando a trabajadores, a los clientes mismos o a personas cercanas y valorar si realmente lo que responden se identifican con lo que somos… o queremos parecer.
- Diferenciación en nuestro sector. Hemos de preguntarnos: “¿Cómo marcamos la diferencia de los otros?” Si hay algo que destaca por encima de todo –calidad, precio, servicio posventa, descuentos– anótate otro tanto en tu ficha.
- Estás siempre presente en eventos y actividades imprescindibles en la agenda de tu sector. Hay citas ineludibles donde hemos de hacernos visibles para que se nos siga teniendo en cuenta. Es un lugar perfecto para hacer networking y seguir dando fuerza a nuestro branding personal-profesional.
- Recibes feedback de los usuarios y la prensa y comunicadores especializados se dirigen a ti para entrevistas, informaciones, participar en jornadas, etc. Es fundamental que los hechos nos demuestren que sí contamos y que sí se nos tiene en cuenta. Un buen medio para valorar todo esto es el recibir consultas de periodistas y bloggers que pueden solicitarnos colaboraciones o incluso información para hablar sobre nosotros o nuestro negocio en sus medios.
- Nadie mejor que tú para representarte a ti y a tu negocio. Hay aspectos que no debemos delegar. Si queremos que nuestro branding sea consistente no dejemos asuntos de importancia en manos de otras personas. Nadie defenderá el concepto de la empresa como nosotros.